El Real Madrid Castilla sigue recuperando el terreno perdido con las decisiones arbitrales de la primera mitad de la temporada, a base de victorias muy sufridas como la conseguida el pasado domingo en el Cerro del Espino frente al Rayo Majadahonda.
Tres puntos defendidos con uñas y dientes tras un golazo espectacular de Valverde por la escuadra desde fuera del área, tan solo unos minutos después de entrar al terreno de juego sustituyendo a Javi Muñoz, que tuvo que retirarse lesionado por problemas en su pierna izquierda.
Sin embargo, el jugador que acaparó toda la atención, incluso de los rivales, fue Aleix Febas. El jugador catalán dio una lección de clase durante los noventa minutos que duró el encuentro. Controló el partido en el centro del campo y fue objeto de falta en todas y cada una de las jugadas, hasta el punto de forzar tres cartulinas amarillas y una de ellas que debió ser tarjeta roja.
El joven jugador del Castilla está dejando muy buenas sensaciones en el club blanco, es uno de los futbolistas de futuro del filial, con categoría y mucha chispa, semejante a la que presente en cada partido Luka Modric, una calidad que puede verse recompensada con el premio del primer equipo.