El derbi dejó algún resquicio negativo en la plantilla de Zidane, uno de ellos fue Gareth Bale. No se vio al galés más determinante y le costó hacerse con un hueco dentro del campo. Al final terminó agotado y siendo sustituido por su entrenador en el minuto 81.
Se echa en falta al mejor Bale. Una lesión en el tobillo truncó uno de los mejores estados de forma de toda su carrera, sino el mejor. Su inicio de temporada fue espectacular y se erigió como el líder del equipo. Sin embargo a su vuelta al grupo le ha costado readaptarse y ha dejado de ser tan efectivo como en los meses iniciales de la competición. Además su expulsión ante Las Palmas supuso un golpe de moral que le ha dejado tocado hasta hoy.
Aún así el Madrid sigue teniendo plena confianza en quien cogerá las riendas del equipo una vez que Cristiano dé un paso al lado. Llega la fase final de la Champions y llega el Clásico, citas que se antojan ideales para una reaparición estelar de Bale.
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