El Bayern de Múnich recibe al Real Madrid este miércoles con un objetivo que tiene nombre y apellidos: Sergio Ramos. El capitán merengue está a una amarilla de cumplir ciclo y perderse el siguiente encuentro, algo que al equipo de Ancelotti le vendría a las mil maravillas en el Bernabéu.

Conocedor de esa ventaja, el conjunto alemán va a ir a por el de Camas durante todo el partido hasta sacarle la amonestación. Un golpe que sería duro para el Real Madrid con la zaga bajo mínimos. Con las lesiones de Pepe y Varane, Nacho y Ramos se postulan como los únicos centrales disponibles de cara a una eliminatoria que va a ser de todo menos un paseo. 

UNA BAJA PELIGROSA

La baja del capitán en el Bernabéu obligaría a Zidane a tirar de Casemiro para suplirle. Sería el reemplazo más natural y lógico, pero modificaría el esquema que tanto le gusta al francés con el brasileño como muro infranqueable en el centro del campo. Malabares de cara a una vuelta de cuartos de final, con la semi en juego y con todo por decidir. Mal momento para la baja de un Sergio Ramos que es fundamental para el Real Madrid.

Difícil escenario para el capitán merengue, pues con Lewandowski delante, y con Robben y Ribéry a los lados tirando de la ofensiva teutona, los duelos encarnizados están asegurados. Por no hablar de Müller o Vidal, que también podrían tener oportunidad de hacer daño a la defensa blanca. Sin embargo, algo parecido le pasa al Bayern con Boateng y la baja de Hummels. Sin embargo, Alaba se postula como un sustituto más fiable en esa demarcación que Casemiro.

MIEDO AL GOL DE RAMOS

Sin embargo, lo que más quiere el Bayern no es anular la faceta defensiva de Ramos en el centro de la zaga sino evitar los peligrosos goles del de Camas. Ya les hizo dos en el Allianz Arena en la semifinal de 2014, dejándoles definitivamente fuera de la competición. Situación que no quieren repetir, estando el capitán en un idilio con el gol en la presente temporada.

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