Este domingo Real Madrid y Barcelona se citan en el Bernabéu en una noche que puede decidir La Liga. Ambos equipos arrastran unos cuartos de Champions disputados esta semana y la anterior que dejan como principales consecuencias el cansancio y las emociones a flor de piel. Por un lado, el pase de los blancos a la siguiente ronda les hace llegar en una tendencia positiva y con más ganas si cabe de dar un puñetazo en la mesa de La Liga. Los culés, por su parte, viajan a Madrid con la frustración de haber caído eliminados y con la necesidad de sacar tres puntos si quieren seguir vivos en la competición doméstica.
El Real Madrid tuvo que superar una eliminatoria muy exigente tanto física como mentalmente. Sobre todo en el partido de vuelta, donde se vieron presionados por un Bayern que echó toda la carne en el asador llegando a una intensa prórroga que pesa en las piernas. Sin embargo, el buen sabor de boca será una inyección de energía de cara al importante duelo del domingo.
LO POSITIVO
Los de Zidane se presentan en El Clásico con los deberes hechos en Champions y con la mejor versión de Cristiano en el momento más importante de la temporada. El portugués de las grandes noches volvió a aparecer para llevar en volandas al equipo a las semifianales y el domingo volverá a ser fundamental en las filas del Madrid en la batalla por La Liga. Además, el resto de sus compañeros también llegan a un gran nivel tras la competición europea, especialmente un Asensio que se ha consagrado en los dos partidos de cuartos y ha dejado una gran imagen en el continente.
La figura de Nacho se eleva también como vital pues, tras las lesiones de Pepe y Varane, se le daba la oportunidad de ser importante en el equipo titular y está cumpliendo con creces. Su buena actuación ante el Bayern demuestra que los partidos importantes también son para el canterano. Por último, el Madrid cuenta con un Bernabéu entregadísimo y se pudo ver en la noche del martes. Este domingo, el jugador número doce volverá a estar presente y empujará como si de una final se tratase.
LO PELIGROSO
El cansancio entra a escena como la consecuencia más negativa de la jornada europea. Los jugadores acabaron algo tocados el martes tras un intenso partido que duró 30 minutos más de lo esperado. Una prórroga al más alto nivel que podría ser un aspecto a tener en cuenta para el partido del domingo. Marcelo sigue acumulando minutos en las piernas y el esfuerzo del Bayern podría pasarle factura. En la otra banda, Carvajal acabó con molestias visibles y en el centro Kroos fue sustituido también con dolores.
Además, ni que hablar hay de los centrales, que llevan varios partidos jugando absolutamente todos los minutos debido a la falta de repuestos tras las lesiones de Pepe y Varane. Aunque hay que apuntar que ni Ramos ni Nacho han mostrado signos de cansancio alguno y están llevando a cabo actuaciones brillantes. La Champions ha vuelto a dejar en evidencia la portería merengue. Keylor Navas sigue sin ser capaz de mantener el cero bajo los palos, algo que podría salir caro en El Clásico.
LAS CONSECUENCIAS EN EL BARÇA
La Champions deja al conjunto culé muy tocado tras no haber sido capaz de remontar el 3-0 de la ida ante la Juventus. Un palo importante en el estado anímico azulgrana que, sin duda, y ya lo dijo Piqué, afectará en el partido ante el Real Madrid. Además, llegan con la presión extra de necesitar los tres puntos como agua para sobrevivir en el desierto. Si pierden, el Madrid habrá dejado La Liga vista para sentencia. Importante consecuencia de los cuartos será el estado en el que llega la estrella del Barça. Messi no ha sabido liderar a su equipo, todo lo contrario a Cristiano, y se planta en el Bernabéu sin haber marcado ni un solo gol en los cuartos de Champions. Su mala forma, unida a la baja de Neymar, puede ser fundamental.
Además, la jornada europea, tanto la ida como la vuelta, deja discrepancias dentro del vestuario culé. Sobre todo en la ida, varios jugadores cargaron en contra del planteamiento de Luis Enrique y la grieta en el grupo se va extendiendo. Sin embargo, el Madrid debe tener cuidado. El Barça se toma El Clásico como la oportunidad de lamerse las heridas, y todos saben que un animal herido es más peligroso. Los blancos no deben confiarse. El estado anímico culé puede ser un arma de doble filo aunque está claro quién se presenta este domingo con ventaja en el Bernabéu.
¡Así celebró el vestuario el hat-trick de Cristiano! by footbie.com