El futuro de Vinicius podía haber sido azulgrana si el Real Madrid no se hubiera interesado por el futbolista. De hecho, el Barça llegó a recibir al padre del brasileño junto a la agencia de representación del futbolista. El club catalán trató de convencer al entorno de Vinicius de firmar por ellos, sin embargo, no salieron convencidos de allí y tal reunión supuso el fin de las esperanzas del Barcelona de hacerse con la nueva joya sudamericana.

El final de la historia ya es por todos conocidos. Vinicius vestirá la camiseta del Real Madrid. Culpa de ello la tuvo la visita que hicieron al club blanco que nada tuvo que ver con la del Barça. Salieron de la reunión encantados y decididos que el Santiago Bernabéu era el lugar donde Vinicius tenía que jugar en su futuro. 

Un varapalo para el club presidido por Bartomeu que ha visto en apenas 24 horas como el Madrid se les adelantaba en dos fichajes. Florentino vuelve a ganar en los despachos.

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