Zinedine Zidane tuvo que tomar una dura decisión el pasado 3 de junio, tan solo 18 futbolistas podían estar en la lista definitiva para la final de la Liga de Campeones y Lucas Vázquez fue uno de los jugadores que tuvo que apoyar al equipo blanco desde la grada del Millennium Stadium de Cardiff. El futbolista gallego fue importante a lo largo de todo el pasado curso, disputó más de dos minutos, repartidos en 50 encuentros, en los que consiguió cuatro goles y repartió diez asistencias, pero en la final de la Champions League ante la Juventus acabó siendo uno de los sacrificados.

Todo esto ha provocado que durante este verano varios equipos europeos hayan llamado a su puerta. El Borussia Dortmund le veía como el sustituto perfecto a Dembélé si el francés acababa saliendo del conjunto aurinegro, mientras que Newcastle y sobre todo Roma han estado muy atentos a todas las novedades respecto al futuro de Lucas. Sin embargo, el entrenador madridista no ha dudado en mostrar su cariño en la gira por EE.UU. al de Curtis, incluso su papel en las Supercopas ha sido importante, tanto como revulsivo como entrando en el once titular en el partido de vuelta frente al Barcelona.

PIEZA CLAVE ESTA TEMPORADA

Zidane sabe que en Lucas Vázquez no solo tiene un futbolista de carácter, muy ligado al ADN del Real Madrid, sino que también es un jugador polivalente, todo un multiusos al servicio del equipo merengue. El gallego puede hacer las veces de interior, exterior y también de lateral diestro, algo importante sobre todo después de la salida de Danilo rumbo al Manchester City. Lucas va a ser muy importante y ya en el debut liguero frente al Deportivo de La Coruña puede disfrutar de minutos en su vuelta a casa. El pasado curso la visita a Riazor no dejó un buen sabor de boca al '17' blanco, ya que cierto sector de la grada blanquiazul cargó contra él por su pasado. Ahora, Lucas tiene la oportunidad perfecta de quitarse esa 'espinita'.

Los detalles de Lucas Vázquez, Cristiano y Varane by footbie.com