Zidane se ha visto en una encrucijada -o en un bendito problema, según se vea- de cara a la elaboración del once que saldrá de inicio contra la Juventus este martes. En su cabeza puede que esté ya todo decidido -de hecho seguramente lo esté- pero hasta cuatro jugadores opositan a un puesto y todos ellos tienen sus credenciales para entrar desde el principio: Bale, Asensio, Isco y Lucas Vázquez.

Sin embargo, para Bale e Isco tiene una especial importancia la decisión que tome Zidane en el Juventus Stadium. Tanto el galés como el malagueño tiene delante suya una gran oportunidad para reivindicarse y por nada del mundo quieren quedarse fuera del once titular.

LA FELICIDAD DE BALE

Bale llega enchufado al partido del martes tras su doblete contra Las Palmas. También viene de brillar con Gales y se ha postulado a última hora como un fuerte candidato a entrar en el once. Se quedó fuera en los dos partidos contra el PSG y eso aún le escuece.

Bale quiere sentir confianza y sentirse importante para continuar en el Real Madrid. Su decisión pasa, por el momento, por volver a la Premier el próximo verano pero partidos como el de Turín pueden hacerle cambiar de opinión.

ISCO DEBE VOLVER A CONVENCER

Isco quiere volver a entrar en el once como ya lo hiciera en Cardiff ante el mismo rival. Su juego puede hacer mucho daño entre líneas a los de Allegri y el propio futbolista es consciente de ello. Posiblemente sea el más adecuado para entrar en el once pero Zidane lleva meses sin tenerlas consigo en cuanto al malagueño.

Su situación es diferente a la de Bale. Al tiempo que es presionado por Guardiola y el City, ha perdido la confianza de Zidane y si este no apuesta por él puede ser muy significativo en cuanto al pensamiento del francés de cara al verano y su futuro.