El Real Madrid abrió el marcador en la final de la Champions League disputada este sábado 26 de mayo de 2018 en el Estadio Olímpico de Kiev. El encargado de marcar el gol no fue otro que Karim Benezema. El delantero francés, muy criticado a lo largo de la temporada, se ha redimido en el final de la misma.
Fue ayudado, en gran parte, por el portero rival, el alemán Loris Karius. Este recogió el balón tras un pase largo del mediocentro alemán Toni Kroos al que Benzema, que no estaba en fuera de juego, no logró llegar. Sin embargo, Karius, tratando de sacar con la mano en corto, le dio al balón al propio Karim, que de rebote anotó el tanto.
La presión del delantero fue efectiva. Presión que ya le surtió efecto ante el Bayern Múnich en la vuelta de semifinales, cuando un grave error del guardameta -también alemán- Sven Ulreich le dejó la diana en bandeja.
Se trata del duodécimo gol de Karim en los 48 partidos que ha disputado esta temporada. Tras un largo periodo sin ver puerta, y siendo muy criticado, el exjugador del Olympique de Lyon ha sido fundamental en el tramo final de la temporada del club merengue en la competición europea.
A sus 30 años, se trata del primer gol de Benzema en una final de Champions, habiendo disputado cuatro: Lisboa en 2014, Milán en 2016, Cardiff en 2017 y Kiev en 2018. Todas ellas con el Madrid. Por si fuera poco, es el primer gol de un francés en una final de Champions desde la volea de Zinedine Zidane en 2002.