Si hay un jugador que encandila al madridismo, ese es Luka Modric. El croata llegó a la capital de España en verano de 2012 para darle al equipo un salto de calidad, que le permitiera ganar, de una vez por todas, la Champions League. La Décima se se le había resistido durante años y años al conjunto blanco y comenzaba a ser una obsesión.

Su llegada fue una de las claves para acabar con ella. Desde que se enfundó la elástica merengue, el Madrid ha ganado cuatro veces la máxima competición continental y vive una época dorada. Una etapa que, a la conclusión del encuentro, Modric ha calificado como dinastía, algo que lograron en su día Los Ángeles Lakers y los Chicago Bulls en el baloncesto norteamericano. 

SE QUEDA CON LA CHAMPIONS

"No cambio la Champions por la Liga y la Copa. Este equipo es de leyenda, hemos conseguido tres Champions consecutivas."

EL MADRID HA HECHO HISTORIA

"Conseguir dos fue algo imposible y conseguir tres Champions era algo impensable. Es nuestra dinastía. Es díficil describirlo con palabras. Hay muchos trabajo por detrás, estamos contentos y felices. Es algo histórico. Impensable. Son tres".

EL MADRID, UNA DINASTÍA COMO LOS LAKERS Y LOS BULLS

"En el baloncesto, los Lakers y los Bulls tuvieron una dinastía. Nosotros la tenemos en fútbol. Es muy complicado, hay mucho trabajo detrás, estamos contentos, felices y hay que disfrutar. Cada titulo es especial".

YA PIENSA EN LA FINAL DEL WANDA

"Estuvimos doce años sin ganar una Champions, La Décima fue muy importante, quizá ese sea el más importante por ser el primero, pero todos lo son. Ojalá estemos el año que viene en el Wanda".