Los veteranos del Real Madrid aguardan en el vestuario antes de jugar el Corazón Classic Match.

Los veteranos del Real Madrid aguardan en el vestuario antes de jugar el Corazón Classic Match.

Fútbol

Vídeo | Así aclamó el Santiago Bernabéu a sus leyendas

Las leyendas del Real Madrid y el Arsenal se citan este 3 de junio en el Santiago Bernabéu para brindar a ambas aficiones una nueva entrega del Corazón Classic Match. Atronador el recibimiento que el respetable merengue ha brindado a sus exestrellas.

3 junio, 2018 19:50

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Como ya es habitual, en las últimas temporadas, el Real Madrid le ha brindado a sus aficionados la oportunidad de disfrutar, en el Santiago Bernabéu, de aquellos jugadores que, en su día, hicieron vibrar a la parroquia merengue. Y todo ello con fines benéficos, ya que los ingresos cosechados se destinarán a los niños más necesitados.

En esta ocasión, como no podía ser de otra manera, a medida que los protagonistas, uno a uno, iban saliendo al terreno de juego, el estadio madridista les ha ido brindando una calurosa ovación. A los habituales galácticos como Roberto Carlos, Raúl, Figo, Guti Morientes, se han unido, este año, otros ilustres, más jóvenes, como Xabi Alonso y Álvaro Arbeloa. Todos ellos, sin excepción, han sentido el afecto del público. La megafonía pronunciaba sus nombres y el estadio retumbaba cuando los presentes respondían a viva voz. Todo un espectáculo.

AMBIENTAZO EN EL SANTIAGO BERNABÉU

Después de enfrentarse en anteriores ediciones a Milan, Bayern Múnich, Manchester United, Juventus, Inter de Milán, Liverpool, Ajax y Roma, la entidad merengue ha apostado, este año, por enfrentarse al Arsenal. Un equipo, entre los que destacan grandes futbolistas de la talla de Petit, Anelka o Campbell, han quedado anonadados con el ambiente que se ha vivido en el Santiago Bernabéu. Raúl, en la primer parte de la contienda, ha abierto la lata y ha colocado el 1-0 en el marcador, con un cabezazo impresionante desde, aproximadamente, el punto de penalti, al que no ha podido responder el guardameta gunner. Y la algarabía se ha vuelto a desatar.