El Mundial de Rusia concluyó el pasado domingo 15 de julio con el contundente triunfo de Francia contra Croacia, que les acreditaba como nuevo campeones del mundo. De esta forma, los franceses recogían el testigo de Alemania en la edición de Brasil de 2014. 

Los franceses vencieron a los balcánicos por 4-2, con una primera parte en la que se pusieron por delante en dos jugadas a balón parado, y en el segundo tiempo se mostraron muy superiores e hicieron que los croatas pagasen por todo el cansancio acumulado. El hombre que se ha encargado de llevar a lo más alto a los galos desde el banquillo es Didier Deschamps.

Tras completar la hazaña, el técnico ha concedido una entrevista para L'Équipe, en la ha ha asegurado su continuidad en el cargo, y se ha acordado de Aimé Jacquet, entrenador que consiguió el título en 1998, pero dimitió nada más acabar el campeonato. Al respecto, Deschamps se ha mostrado muy convincente, y ha declarado que "hay un contrato que honrar, el plan es irse una semana de vacaciones y volver pronto". No hay que olvidar que en el Mundial de 1998 que conquistó Francia, formó parte del plantel como anfitrión.

Las palabras de Deschamps llegan justo un día después de que se conociera que Zidane podría pasar a trabajar en la Juve. Tal y como adelantó EL BERNABÉU, tenía oferta de la Federación Francesa y de Catar. El extécnico del Real Madrid ya anunció que no buscaba ningún equipo al que entrenar durante la próxima temporada, pero tiene varias ofertas encima de la mesa que tendrá que estudiar y tomar una decisión.