El Real Madrid y el Barcelona jugaron un disputado y emocionante partido este miércoles en el Camp Nou. Como suele ocurrir en este tipo de partidos, la tensión entre los dos grandes del fútbol español estuvo más que presente. Sin embargo, esto no fue un problema para que se viera el buen rollo que tienen los jugadores.
Este es el caso de Sergio Ramos y Gerard Piqué. Ambos son dos de los estandartes de sus equipos, pero demostraron la buena relación que tienen durante la formación de una barrera en el lanzamiento de una falta. Tal y como captaron las cámaras de Cuatro, el catalán estaba hablando con uno de los integrantes de la barrera cuando el camero llegó y le pegó un pequeño empujón, algo que provocó las risas de ambos.
Pero el catalán estuvo muy activo en este aspecto durante el encuentro. A Piqué también se le pudo ver charlando con Marcelo justo antes del episodio vivido con Ramos en la formación de la barrera.
Situación muy distinta a la de Luis Suárez
Si Piqué demostró el buen rollo que tiene con los jugadores del Real Madrid, en el extremo opuesto se encontró Luis Suárez. El delantero volvió a demostrar los malos modos que le caracterizan en cada partido que juega. El ariete volvió a protagonizar feos gestos, como el que le hizo al Mateu Lahoz, árbitro del partido.
Además, también se le vio enfrentarse a Marcelo. El brasileño le recriminó sus excesivas quejas por una supuesta falta de Sergio Ramos a Leo Messi, y ambos acabaron enfrentados. Finalmente, el capitán del Real Madrid tuvo que acudir para separarlos y que la situación no fuera a más.
[Más información: Piqué: "La jugada de Ramos creo que es segunda amarilla, es interpretable"]
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