La afición del Real Madrid volvió a demostrar una vez más que están comprometidos con el equipo al cien por cien. Banderas, bufandas y miles de camisetas blancas se dieron cita en los aledaños del Santiago Bernabéu para recibir al autobús del equipo blanco en la previa de la vuelta de las semifinales de la Champions League ante el Manchester City. La 'busiana' fue épica para alentar a los futbolistas para conseguir la remontada este miércoles en Chamartín.
Una gran marea blanca se hizo sentir en la plaza de los Sagrados Corazones mientras los futbolistas grababan con el móvil desde su asientos la impresionante imagen. Los cánticos y gritos de apoyo al Real Madrid fueron el ingrediente principal en una tarde que se presentaba muy caliente para dar paso a una de las noches mágicas que quiere protagonizar el equipo con más Copas de Europa de la historia. El reto es levantar un 4-3 para conseguir una plaza en la final de París.
Para conseguir la remontada, era muy importante el apoyo del Bernabéu, además de la presión que pueda ejercer la afición sobre el rival. Sin embargo, las muestras de apoyo a los jugadores han comenzado antes de que empiece el partido. Como ya es habitual, ha habido una quedada en los alrededores del coliseo antes del duelo para recibir al equipo y darles el primer empujón. La llamada popularmente como 'busiana' la convocó el grupo de animación de la Grada Fans.
A las 19:00 horas había quedada en el Bernabéu y desde esa hora hasta que pasadas las 19:30 ha pasado el autobús del Real Madrid han aguantado los madridistas en el centro de la ciudad, junto a la plaza de los Sagrados Corazones, a la espera del autobús de su equipo. Han sido minutos de espera e ilusión, de reconocimiento de madridistas que sumaban dos años sin poder hacer algo así y lo han disfrutado con locura. La llegada del autobús, flanqueado por furgonetas de Policía ha desatado el éxtasis de los aficionados, que al ver a los suyos se han llenado de moral.
La respuesta ha llegado por parte de la afición del conjunto merengue. Y tal como manda la tradición cuando es una gran cita, una noche de Champions League, los seguidores madridistas acudieron en masa al llamamiento de sus ídolos para acompañarles hasta su llegada al estadio de Concha Espina. Bufandas al viento, engalanados con la blanca y cantando por las calles de la capital para dar el primer empujón a los futbolistas del Real Madrid. El 'primer gol' lo marcaban ellos, el resto es tarea del equipo.
Desde horas antes del encuentro fueron acercándose los aficionados para no fallar a la petición de sus capitanes. Comenzaba así la fase final de la Champions para el Real Madrid y lo hacía presumiendo de la mejor afición del mundo. "¡Cómo no te voy a querer!". Más impresionante aún si cabe fue la llegada vivida desde dentro de la marea blanca que se agolpaba a lo largo de Concha Espina para recibir a los jugadores.
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