2 de mayo de 2018. Se disputa el partido de vuelta de semifinales de la Champions League entre el Liverpool y la Roma. En un bar de Egipto disfrutan del encuentro mientras animan a Mohamed Salah, jugador del conjunto inglés y todo un ídolo en el país africano. Es entonces cuando reciben una inesperada visita.

Aunque lo parezca, no es el propio Salah, que en esos momentos se encontraba en la capital italiana disputando el partido. Se trata de Ahmed Bahaa, egipcio conocido por ser físicamente idéntico al propio Salah, a quien ya tuvo la oportunidad de conocer en persona.

"Es él el que se parece a mí, porque yo soy más viejo", bromea el nacido en El Cairo, que también afirma: "Me encuentro con gente que no conozco y me reciben con los brazos abiertos como si fuéramos amigos o primos. Así es como la gente ve a Salah, como uno de ellos".

El resultado es de sobra conocido. El Liverpool perdió 4-2, pero el 5-2 logrado en la ida -donde Salah anotó dos goles y dio dos asistencias- le valió para clasificarse para la final, que jugará el sábado 26 de mayo ante el Real Madrid en el Estadio Olímpico de Kiev.

Salah ha firmado una temporada brillante a las órdenes de Jürgen Klopp después de fichar el pasado verano precisamente de la Roma por 42 millones de euros. 43 goles y quince asistencias en cincuenta partidos le han valido al egipcio -que disputará el Mundial de Rusia 2018 con su selección- para despertar el interés de los grandes clubes europeos.