¿Afectará la tecnología Blockchain al juego online?
España es un país de jugadores, da igual si las apuestas son online u offline. Este sector mueve más de 35.000 millones de euros en nuestro país, una cifra que representa el 3,5 % del PIB. El sector genera más de 80.000 empleos directos, y estas cifras no paran de crecer año tras año, gracias a la liberalización del sector y a la tecnología, que no deja de avanzar y mejorar la experiencia del usuario, lo que ha propiciado fundamentalmente una mayor seguridad y garantías en los pagos.
En este escenario la tecnología blockchain, que se ha convertido en un fenómeno tecnológico imparable, puede ser otro punto de inflexión. Expertos en la materia consideran que puede convertirse en la manera más común de realizar transacciones financieras de aquí a un futuro muy cercano debido a sus ventajas en materia de transparencia y diversificación, que a la postre redundan en una mayor seguridad para el usuario. La descentralización de estas criptomonedas garantiza que no haya interferencia o bloqueo a terceras personas, siendo una de las razones de ser de estas monedas.
Las “cadenas de bloques”, una traducción literal de blockchain que cuesta asimilar, está transformando varias industrias, y el sector del entretenimiento online es de los primeros mercados en experimentar esta nueva forma de pago. La industria del gaming y los casinos de juego online están empezando a darse cuenta de los beneficios que se pueden obtener con ella. Entre sus ventajas están la garantía de unos pagos más seguros, transparentes (ya que gobiernos e instituciones públicas no intervienen) y rápidos, donde los jugadores y desarrolladores podrán sacar el máximo partido a los juegos en formato digital.
Este tipo de tecnología ha sido criticada porque requiere una alta cantidad de recursos tecnológicos para crear la “cadena de bloques”, como de una buena CPU y tarjeta gráfica, y a su vez “minar” moneda Bitcoin. Otra de las desventajas según algunos especialistas es que la moneda Bitcoin tendrá un máximo de monedas y no se podrá crear más de 21 millones, regla impuesta por su creador Satoshi Nakamoto en 2009, al ser una moneda deflacionaria como el oro.