Rodrigo Reñones no seguirá en el banquillo del Quabit Guadalajara tras el descenso
Rodrigo Reñones, que llegó a Guadalajara como "revulsivo" para que el Quabit se mantuviera en la liga Asobal, no continuará el año próximo al frente de la escuadra morada, que este domingo se consumara el descenso de categoría del equipo al empatar en casa (30-30) con Fertiberia Puerto Sagunto.
Reñones ha dado a conocer este lunes que no va a continuar entrenando al equipo de Guadalajara "por motivos personales", ya que según ha dicho "tengo proyectos en Santander que debo atender, y allí volveré cuando termine la temporada".
"Me comprometí con el club a dirigir sus últimos siete partidos de liga, les agradezco la dedicación que ha puesto para que yo desempeñe mi trabajo de la mejor manera", ha comentado Reñones, que ha añadido que "Guadalajara estará siempre, como ciudad y como club estarán siempre en mi cabeza y en mi corazón".
El técnico cántabro, que ha dirigido al Quabit Guadalajara en sus seis últimos compromisos ligueros, con el balance de una victoria (ante Ademar León) cuatro derrotas y un empate, concluirá este miércoles su periplo en el banquillo alcarreño en un irrelevante duelo con Granollers, en partido aplazado de la jornada 31 de la liga Asobal.
Tras once temporadas consecutivas en la máxima categoría del balonmano español, el Quabit Guadalajara desciende a División de Honor Plata.
Al respecto, Reñones ha admitido que "no hemos sido capaces de entender lo que había en juego, tampoco de haber sumado dos puntos frente a un equipo ya descendido como Puerto Sagunto, lo que nos habría dado algo de oxígeno para continuar peleando", y ha aseverado que "evidentemente estamos donde estamos por méritos propios".
Y ha agregado que "como entrenador no he sido capaz, en los partidos que he estado aquí, de sacar el máximo rendimiento a la plantilla, que yo creo que este club merece por muchas circunstancias", al tiempo que ha lamentado que "es muy triste que un club que ya tenía una larga trayectoria en liga Asobal, por desgracia y conmigo como entrenador, no siga en la máxima categoría del balonmano español el próximo año".
Reñones ha señalado que "era consciente de la dificultad de la situación y del calendario", pero que también "pensaba que la plantilla tenía un nivel y que, de alguna manera, iba a ser capaz de sacarle el máximo rendimiento, y no ha sido así".
En todo caso, ha afirmado que "no hay nada que objetar a los jugadores, por el esfuerzo que han hecho cada día en los entrenamientos, lamentablemente no hemos sido capaces de trasladar a los partidos ese alto rendimiento".
Según el entrenador cántabro: "Descender nos toca a todos muy adentro, pero si estamos aquí es por méritos propios, y es algo que nos debe hacer reflexionar a todos", y ha apuntado que "ahora el club debe pelear por conseguir un ascenso y recuperar la máxima categoría".