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Economía DECISIÓN DEL JUZGADO DE ALCÁZAR DE SAN JUAN

Suspenden el desahucio de una familia Campo de Criptana, que sigue en su casa

25 abril, 2017 11:35

Una familia de Campo de Criptana (Ciudad Real) que iba a ser desahuciado de su vivienda por no poder afrontar el alquiler ha podido permanecer en ella, después de que un juzgado de Alcázar de San Juan haya suspendido el lanzamiento.

El padre de la familia, compuesta por un matrimonio y tres hijos, ha indicado a Efe que siguen en su casa porque se ha suspendido el lanzamiento, aunque aún no se lo han confirmado ni su abogado ni el juzgado que ha paralizado el lanzamiento.

Asimismo, ha explicado que viven en esa vivienda desde 1999, aunque el inmueble estaba hipotecado, por lo que al no poder hacer frente a los pagos se pusieron en manos de un prestamista natural de la provincia de Ciudad Real que es abogado y que está colegiado en Madrid.

Éste se ofreció a prestarles el dinero y suscribieron, en 2006, en una notaria de Madrid una escritura de préstamo con garantía hipotecaria por importe de 32.500 euros, con lo que se estableció una segunda hipoteca por la vivienda.

Ni un duro

Sin embargo, el afectado "no ha visto ni un duro porque nunca le llegaron a dar el cheque por esa cantidad", han asegurado Efe fuentes de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Campo de Criptana.

También han detallado que no pudieron abonar los 32.500 euros en el plazo de los seis meses que se establecieron para ello, por lo que en 2008 volvieron de nuevo a la misma notaría para formalizar la propuesta del prestamista.

La propuesta consistió en comprarles la casa por 80.000 euros, de los cuales unos 47.000 euros se destinarían a pagarlos 32.500 euros que les prestó inicialmente, más los intereses, mientras que con el resto del dinero se iba pagar y cancelar la primera hipoteca que tenían contratada con el banco, han precisado las mismas fuentes.

Además, el prestamista les dijo que podían continuar en la vivienda mediante el abono de un alquiler de 600 euros mensuales, que tampoco han podido afrontar, y una fianza de 3.000 euros por la que el matrimonio fue embargado y que actualmente está pagando un familiar, han añadido.