Castilla-La Mancha es una de las cinco comunidades autónomas que cerró septiembre con déficit, -0,32 por ciento que supone 135 millones de euros.

En conjunto, las comunidades autónomas cerraron septiembre con un superávit de 2.035 millones, una cifra que cuadriplica los 481 millones del mismo mes del año anterior, lo que equivale al 0,17 % del PIB, frente al 0,04 % de un año antes, dentro del objetivo de estabilidad presupuestaria.

Son las cifras que hoy ha ofrecido el Ministerio de Hacienda, que señala que el déficit de las administraciones públicas, excluyendo las corporaciones locales, se situó en los nueve primeros meses del año en 18.585 millones de euros, equivalentes al 1,53 % del PIB, lo que supone 0,51 puntos porcentuales menos que en el mismo periodo de 2017.

Las autonomías tuvieron un superávit conjunto del 0,17 %, lo que representa 2.035 millones de euros, una situación que Hacienda atribuye fundamentalmente a la evolución de los ingresos, que han crecido un 5,5 %, frente al menor aumento de los gastos (4,3 %).
Sólo cinco comunidades tienen déficit, encabezadas por Murcia (-0,51 %), seguida de Comunidad Valenciana (-0,35 %), Navarra (-0,34 %), Castilla-La Mancha (-0,32 %) y Castilla y León (-0,11 %).

Al lado contrario se sitúan las otras doce, entre las que sobresale Canarias, con un superávit de, 1,41 %, muy por delante de Asturias (0,66 %) y País Vasco (0,65 %).

Entre los recursos, el departamento que dirige María Jesús Montero destaca la subida de los ingresos impositivos, sobre todo los que recaen sobre la producción e importaciones, que se elevan un 7,7 %.

También subraya el incremento del 5,8 % registrado en las transferencias recibidas de otras administraciones públicas, principalmente las relacionadas con el sistema de financiación, con un incremento de recursos netos del 3,7 % (2.897 millones de euros más).

Menciona además el repunte de los recursos procedentes del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, que aumentan un 10,1 %, en 624 millones, compensando la subida del 3 % y 1.611 millones de la remuneración de asalariados.

Los recursos no financieros, por su parte, han crecido un 5,5%, en 6.812 millones, y registran en 2018 un importe de 130.011 millones.

Respecto a los gastos, los consumos intermedios crecen un 2 %, mientras que la remuneración de asalariados se incrementa un 3 % (la mayoría de las comunidades han aplicado la subida del 1,5 % con efectos retroactivos desde enero, así como el incremento adicional del 0,25 %).
Las transferencias sociales en especie crecen un 3 % y la formación bruta de capital fijo un 4,4 %.