Castilla-La Mancha cambia las normas para las obras, construcciones e instalaciones en suelo rústico
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha iniciado el proceso para modificar la normativa en relación a los requisitos que deben de cumplir las obras, construcciones e instalaciones en suelo rústico, con el fin de facilitar el desarrollo económico de las zonas rurales y luchar contra la despoblación.
El primer paso de este proceso se ha dado este jueves, con la presentación a la Comisión Regional de Ordenación del Territorio y Urbanismo del borrador de la instrucción técnica de planeamiento sobre determinado requisitos sustantivos que deberán cumplir las obras, construcciones e instalaciones en suelo rústico, que más tarde deberá de ser informado por este órgano y también ser remitido al Consejo Consultivo.
Así lo ha dado a conocer en rueda de prensa el consejero de Fomento, Nacho Hernando, que ha explicado que esta modificación técnica de los requisitos que establece la normativa tiene como finalidad evitar que haya obstáculos para el desarrollo económico y productivo de la región, especialmente en suelo rústico, ya que en las zonas rurales el Gobierno regional va a ser "un firme aliado en el desarrollo empresarial de la región".
Asimismo, ha apuntado que esta modificación se va a hacer incorporando los objetivos de desarrollo sostenible de la agenda 2030, que "es una herramienta más para luchar contra la despoblación".
Entre otros cambios, la futura normativa reconocerá por primera vez, en el ámbito de los usos dotacionales privados, los puntos de carga de energía eléctrica o cualquier otro similar, como por ejemplo las gasineras, que van a tener el mismo régimen de uso dotacional privado que las gasolineras convencionales.
También se plantea una disminución de la parcela mínima en el supuesto de usos secundarios vinculados al sector primario que se desarrollen en parcelas de regadío, lo que va a suponer que los pequeños agricultores tengan las mismas oportunidades que las grandes empresas de la industria agroalimentaria, ha señalado el titular de Fomento.
Además, se va a distinguir entre el uso de regadío y de secano, para adecuar la normativa a la particularidad de cada uno de estos usos del suelo rústico, ha añadido.
Por otra parte, la nueva normativa establecerá un aumento del porcentaje de ocupación de parcelas para determinados usos productivos, sin incluir el residencial.
Así, se determinará un incremento de hasta el 20 por ciento de superficie máximo de superficie ocupada para edificación de industria del sector primario y un aumento de edificación para uso industrial también del 20 por ciento, así como una subida de la ocupación de tiendas de artesanía o de productos agrícolas de hasta el 10 por ciento de la superficie.
Se planteará también un incremento de la superficie ocupada máxima de hasta el 20 por ciento para el uso hotelero y hostelero, con un impulso a las casas rurales al turismo rural, y un aumento de superficie máxima de uso recreativo de hasta el 10 por ciento de la parcela, ha avanzado Hernando.
El consejero de Fomento ha señalado que todas estas medidas van encaminadas a que las empresas tengan terreno disponible para ubicar instalaciones o para ampliar las ya existentes en Castilla-La Mancha.