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El campo CCOO DICE QUE LOS ACCIDENTES LABORALES DUPLICAN LOS QUE FIGURAN EN LAS ESTADÍSTICAS

Denuncian el dato más dramático y oscuro que esconde la agricultura en Castilla-La Mancha

20 mayo, 2017 11:27

Comisiones Obreras ha asegurado este viernes que el número de accidentes laborales que se producen en el sector agrícola en Castilla-La Mancha son el doble de los que aparecen en las estadísticas de siniestralidad laboral.

Así lo han indicado, en declaraciones a los medios de comunicación, la secretaria regional de Salud Laboral y Política Institucional de CCOO de Castilla-La Mancha, Raquel Payo, y la secretaria provincial de Albacete, Carmen Juste, con motivo de su participación en la feria Expovicaman de Albacete, según ha informado en una nota de prensa el sindicato, con motivo de

Han advertido del aumento en los últimos cuatro años de la siniestralidad laboral en el sector agrario en la región, en el que las estadísticas oficiales no contemplan los accidentes no declarados sufridos por las personas que trabajan por cuenta propia.

Tampoco recogen los accidentes que sufren personas jubiladas, ni los de los familiares colaboradores o los que se producen en la economía sumergida, de modo que el sindicato estima que el número de accidentes reales es el doble al de los contabilizados.

Se han incrementado un 15%

Según los datos oficiales, en los últimos cuatro años los accidentes del sector agrario se han incrementado un 15 %, pasando de 1.996 en 2013 a 2.312 en 2016, lo que supone 316 accidentes más.

En este periodo, se han registrado 19 accidentes mortales y 122 graves, ha indicado Payo, que ha precisado que los accidentes leves no se declaran como accidentes de trabajo, sino como patología común.

Asimismo, ha dicho que hay que considerar como una fuente importante de accidentes los sufridos por los familiares colaboradores, personas jubiladas y aquellas cuya actividad secundaria se realiza en la agricultura, que se no están contabilizando en las estadísticas de siniestralidad.

La existencia de explotaciones mayoritariamente reducidas y familiares, gestionadas por autónomos y cuyos trabajadores y tareas son muy variables, sumado a la alta temporalidad, dificultan la formación en materia de prevención de riesgos laborales y, por tanto, la posibilidad de que haya una cultura preventiva adecuada, e inciden en un aumento de la siniestralidad laboral, ha señalado Payo.