Agricultores franceses derraman dos cisternas de vino manchego: 100.000 litros por el suelo
- UPA de Castilla-La Mancha ha condenado estos hechos y ha solicitado a las autoridades competentes una "defensa firme" del sector vitivinícola.
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Agricultores franceses han derramado este martes dos cisternas de vino de Castilla-La Mancha en el peaje de Le Boulou, en la autopista A9, donde se encontraban protestando en oposición al acuerdo entre la Unión Europea y Mercosur, impidiendo la circulación de camiones procedentes de España.
Se trata de dos cisternas de la empresa de transportes Travesa, ubicada en Campo de Criptana (Ciudad Real), que contenían vino blanco. En total, los manifestantes han vaciado 100.000 litros -50.000 por cada camión- que han quedado derramados en la calzada.
En un vídeo publicado en redes sociales por Jorge Jarmillo, director del programa 'El Campo' de Castilla-La Mancha Media (CMM), se puede ver cómo ha quedado la carretera.
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UPA muestra su preocupación
Ante estos hechos, la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) de Castilla-La Mancha ha reiterado su condena y ha solicitado a las autoridades competentes una "defensa firme" del sector vitivinícola.
En un comunicado emitido al consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, UPA ha manifestado su "preocupación" por los "continuos agravios" sufridos por los viticultores españoles y le ha pedido "que transmita al Ministro de Agricultura la necesidad de que su homólogo francés garantice el respeto a nuestro sector".
Asimismo, la organización ha expresado su punto de vista sobre el borrador de la norma de comercialización presentado por la Interprofesional del Vino de España, que plantea penalizaciones a parcelas con sobreproducción, mostrándose contraria a esta medida puesto que "penaliza al agricultor por decisiones que no están bajo su control, como el destino final de sus uvas".
En este sentido, ha subrayado la "importancia" de aplicar las herramientas ya existentes, "como el control de rendimientos establecido en el Real Decreto, que limita la producción a 18.000 kilos por hectárea para variedades tintas y 20.000 para blancas".
"Si los consejos reguladores hicieran un control eficaz y radical de rendimientos de las parcelas acogidas a las denominaciones de origen, frenaríamos el potencial productivo de la región", ha señalado UPA, que ha solicitado que "se vuelva a publicar la limitación del contenido mínimo que tiene que tener la graduación de la uva y que tenga continuidad en el resto de campañas, independientemente de la producción existente".
"Es flaco favor el que se hace al sector si se permite que cooperativas y bodegas puedan admitir uva con menos de esa graduación", ha añadido.
Por último, la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos ha hecho alegaciones a la futura ley de restructuración y reconversión de viñedo y ha pedido contar con "fondos extraordinarios" para paliar el abandono del viñedo y la "ruina" de los viticultores.