Denuncian las condiciones "infrahumanas" que sufren en Albacete 300 trabajadores del campo
El secretario provincial de Industria de CCOO Albacete, Juan Antonio Cuevas, ha denunciado la situación de más de 300 trabajadores del campo que trabajan en "condiciones infrahumanas", en concreto en las poblaciones de Pozo Cañada, Chinchilla y Pozohondo.
Así se ha manifestado en la rueda de prensa celebrada este jueves en la sede de CCOO Albacete, a la cual se han desplazado la mayoría de los trabajadores afectados, vinculados laboralmente por un gestor autónomo a la empresa Agrupación Frutícola Lucas de Murcia para denunciar una situación de continuas irregularidades que ponen en riesgo sus vidas, según ha informado en nota de prensa CCOO.
Un drama, que a juicio de Cuevas, tiene "nombres y apellidos que no trata de criminalizar a todos los empresarios del campo, sino de denunciar estas situaciones irregulares que actualmente se están produciendo en el sector del campo".
De otro lado, Ana Albaladejo, miembro de la ejecutiva de CCOO Industria de Albacete, ha manifestado su preocupación por una situación que "se denuncia año tras año".
"Hay que poner freno"
En su intervención ha subrayado que "la explotación de personas en condiciones de esclavitud debe erradicarse de forma inmediata. La incomprensión ante la falta de respuesta por parte de las autoridades y de los organismos de inspección hace que la situación alcance una gravedad a la que hay que poner freno", ha señalado.
En este sentido, la Federación de Industria de CCOO, representada por Javier González, ha insistido en varias ocasiones que esta situación "no es un caso aislado que tenga lugar únicamente en Murcia", informando de que en la provincia existen "claros ejemplos" de empresas que cometen estas irregularidades, como La Roda, Barrax y La Gineta, entre otras.
El testimonio de uno de los trabajadores marroquíes afectados, Shiba Abdegkrin, ha resumido "las lamentables condiciones laborales y explotación que sufren cada día trabajando a destajo, totalmente desprotegidos ante un sistema que prefiere mirar a otro lado".
"Actualmente no reciben ni el salario, por lo que viven de préstamos y no pueden ni atender sus obligaciones familiares", ha criticado Javier González, quien ha continuado diciendo que se trata de "un sueño roto, que ha pasado a convertirse en una pesadilla, que todos los días comienza a las seis de la mañana, cuando emprenden su viaje desde Murcia a Albacete".
Por último, en la declaración ha mostrado su preocupación por "las amenazas que han recibido por hacer pública la dramática situación que están viviendo".