La Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha ayuda a UNICEF con los niños de Siria

La Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha ha renovado su convenio de colaboración con UNICEF, por el que contribuirá a la labor de ayuda humanitaria de esta ONG en Siria a favor de los niños.

El convenio fue firmado por el presidente de Caja Rural Castilla-La Mancha y su Fundación, Javier López Martín, y la presidenta del Comité de Castilla-La Mancha de UNICEF, Asunción Díaz del Río, en presencia de la directora general de la Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha, Ana López-Casero, informa la entidad en un comunicado.

UNICEF realiza labores de nutrición, agua, saneamiento e higiene, educación, protección y salud en Siria.

Este es el segundo convenio de colaboración que la Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha firma con Asunción Díaz del Río como presidenta de UNICEF Comité Castilla-La Mancha, aunque el convenio entre ambas entidades se mantiene desde 2008.

Javier López consideró “necesario” este convenio “porque las personas más vulnerables en una situación de emergencia como la de Siria siempre son los niños”. Por ello deseó “que este acuerdo ayude a paliar el dolor y las necesidades de los niños sirios”.

ONG Dinámica y eficiente

El presidente de Caja Rural Castilla-La Mancha y su Fundación dio la enhorabuena a UNICEF “por su fructífera labor” y por ser “una organización dinámica y eficiente, formada por personas comprometidas que se esfuerzan cada día en defender y preservar los derechos de la infancia”.

Por su parte, la presidenta de UNICEF agradeció la colaboración de la Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha siempre que la ONG se lo ha solicitado, y añadió que el dinero aportado por la entidad financiera “se utiliza para salvar vidas, desde la protección de los niños hasta salvaguardar sus derechos a todos los niveles”.

Asunción Díaz del Río explicó que en un conflicto como el sirio que cumple ya 6 años, más de 8 millones de niños y niñas necesitan ayuda urgente, 2,8 millones de niños viven en zonas sitiadas o de difícil acceso y hay graves violaciones de los derechos de los niños, cortes de agua como táctica de guerra, lucha por la supervivencia, obligación de algunas familias de tomar medidas desesperadas por la pobreza e interrupción de la educación. Una generación de niños que van a cumplir 7 años no han conocido otra situación ni saben lo que es vivir sin violencia.

Ante ello, UNICEF previene y trata la desnutrición, asegura el abastecimiento de agua, distribuye materiales educativos, rehabilita escuelas, instala espacios temporales de aprendizaje, da apoyo psicosocial a los niños afectados y previene y trata enfermedades mortales para los niños como el sarampión, la diarrea o la malaria, además de proteger a los refugiados, 2,3 millones de niños y niñas sirios viven en campos de refugiados, asentamientos informales y con familias de acogida en los países limítrofes (Líbano, Jordania, Irak, Turquía y Egipto).