La empresa Schweppes Suntory va a invertir 60 millones de euros en su planta de Toledo entre los años 2018 al 2021, al tiempo que se propone reducir los consumos de agua y energía y las emisiones de CO2.

Así lo han expuesto los directivos de la empresa durante la visita realizada este lunes por el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, junto con la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, para conocer las líneas de producción y las mejoras realizadas en la fábrica.

La inversión anunciada de 60 millones vendrá a sumarse a la realizada en los últimos tres años de 46 millones de euros y que, entre otras cuestiones, ha servido para mejorar la cubierta de la planta y, con ello, su eficiencia energética, en consonancia con la filosofía de desarrollo sostenible de la empresa japonesa Suntory.

Schweppes Suntory España ha puesto en marcha un proyecto de transformación tecnológica en su planta de Toledo, que los directivos califican como la "joya de la corona", con el objetivo de posicionarla como un modelo de referencia dentro del Grupo Suntory.

Por fases

En la primera fase del proyecto, la compañía transformará una de las líneas de producción gracias al empleo de tecnología de última generación, que le permitirá monitorizar todos los parámetros que intervienen en el proceso de producción, optimizándolo y haciéndolo más eficiente.

La nueva línea resultante permitirá a Schweppes Suntory España maximizar la calidad así como agilizar los cambios de formato y producto, responder con mayor rapidez a las demandas del consumidor y reducir su impacto en el medioambiente, gracias a un proceso de producción más eficiente.

La fábrica se ha marcado plazos para optimizar los recursos de agua y energía, de manera que pretende reducir un 20 % el consumo de agua en 2020, un 15 % las emisiones de dióxido de carbono y un 25 % el consumo energético, porcentajes que llegarán a reducciones del 50 % en el año 2050.

La empresa se instaló en Toledo en 1961, en el polígono residencial, desde donde se trasladó a su actual ubicación en el polígono industrial, donde ocupa una superficie de 41.300 metros cuadrados, con una plantilla de 275 empleados y que produce 817 millones de botellas al año de marcas tan conocidas como Schweppes, La Casera y TriNa.

Más inversión, más empleos

La consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, en declaraciones a los periodistas durante al visita a la fábrica, ha manifestado la intención de la Junta de acompañar en todo su proceso de innovación, precisamente en un sector muy fuerte en la comunidad autónoma como es el de bebidas.

Respecto a la inversión de 60 millones de euros los próximos años, la consejera ha señalado que "todas las inversiones llevan incremento de personal".

"No conocemos los datos exactos de la generación de empleo que conllevará la inversión, pero estamos convencidos de que va a conllevar una ampliación de los puestos de trabajo y ahí meteremos también todas nuestras líneas de apoyo a la contratación y la formación, con las necesidades concretas que demandan nuestras empresas", ha asegurado Franco.

Por su parte, el concejal de Promoción Económica del Ayuntamiento de Toledo, Teo García, también ha mostrado el respaldo del Ayuntamiento a esta empresa y a cualquiera que se ubique en la ciudad. Ha explicado que, anualmente, más de 23.000 tráiler pasan por el polígono, que requiere una mejora de los viales, asfaltado e iluminación, que el Ayuntamiento está dispuesto a hacer con los fondos europeos ya concedidos a través de la estrategia de desarrollo urbano sostenible.