Tirón de orejas de la Inspección a la empresa de las ambulancias en una provincia de Castilla-La Mancha
El sindicato CCOO ha señalado que la Inspección de Trabajo ha puesto "deberes" a la UTE Ambulancias Cuenca, concesionaria del transporte sanitario terrestre en la provincia, y le ha dado tres meses de plazo para cumplirlos.
En concreto, la Inspección ordena a la UTE "iniciar los trámites o negociaciones para la instauración de un Sistema de Movilidad y Promoción Interna (promoción profesional y cobertura de vacantes)" y "realizar y activar un Protocolo de prevención y actuación por acoso laboral y un Protocolo ante la violencia en el trabajo", ha informado CCOO en nota de prensa.
La Inspección, según el sindicato, recuerda a la empresa que en todos los casos debe respetar el Plan de Igualdad, el convenio colectivo y el Estatuto de los Trabajadores; y advierte "expresamente" a la UTE que, para cumplir con el requerimiento, los documentos que debe presentar antes del 30 de mayo para acreditarlo deben garantizar tanto "la ausencia de discriminación" como "la indemnidad de los trabajadores".
"Esto es un balón de oxígeno para los trabajadores y trabajadoras de la UTE, pues saben que no pueden ser sancionados ni discriminados ni represaliados por reclamar judicialmente lo que les debe la empresa, que no cumplió el convenio colectivo del sector y también está incumpliendo ya el nuevo convenio", ha indicado el responsable del sector de Transporte Sanitario de CCOO-FSC en Cuenca, Ángel Luis Castellano Bobillo.
Bobillo recuerda que el pasado verano, "con motivo del proceso de promociones -cambios entre los servicios de Urgente y el No Urgente, o cambios de unidad o base- en la empresa, la dirección de UTE remitió un escrito al Comité de Empresa en el que literalmente advirtió que sacaría a promoción "todos los puestos que provisionalmente estén ocupados por personal en prácticas, y aquellos que puedan o estén ocupados por algún trabajador que tenga litigios o reclamaciones de carácter judicial, vinculados a su puesto actual".
"Valoramos muy positivamente el requerimiento de la Inspección y el trabajo de la funcionaria asignada al caso", señala Bobillo, que califica como "un buen tirón de orejas, un serio correctivo a la UTE que utilizó la amenaza de sacar a promoción los puestos de los trabajadores que reclamaban sus salarios y derechos; y que ahora sabe que, para llevar a cabo estos procesos, tiene que negociarlos y respetar la normativa vigente y la doctrina del Tribunal Supremo".
"Y, lo que es aún más importante, tiene que elaborar y activar sendos protocolos para prevenir cualquier tipo de acoso laboral y violencia en el trabajo", ha afirmado Bobillo.