Un paso más en la guerra interna de la D.O. de Valdepeñas, con una ausencia sonada

El sector productor de la Denominación de Origen (DO) de vinos Valdepeñas no ha asistido este viernes a la junta directiva convocada para aprobar el incremento del rendimiento por hectárea para esta campaña de vendimia, porque sus reivindicaciones no han sido incluidas en el orden del día.

Con su ausencia, el sector productor, compuesto por las organizaciones agrarias Asaja, UPA y COAG, y Cooperativas Agro-alimentarias Castilla-La Mancha, se reafirma en la necesidad de desbloquear la Denominación de Origen mediante la modificación de los estatutos para que una asociación, en alusión a Asevivaldepeñas, liderada por Félix Solís, no tenga "poder" para vetar al resto.

Los agricultores exigían que en el orden del día de la reunión se incluyera la modificación de los estatutos para que ninguna asociación pueda ostentar más del 40 por ciento de los votos de cada sector, y que en caso de que existan dos asociaciones en un mismo sector, cada una de ellas tenga el 50 por ciento de los votos, para impedir así el veto de uno de los colectivos de los industriales.

La decisión de los productores , a la que también se ha sumado Avival, la asociación liderada por el industrial vinícola José García Carrión, ha sido afeada por el resto de los elaboradores, que no han podido celebrar la reunión por falta de quórum.

Al respecto, el expresidente de la DO Valdepeñas y representante de Asevivaldepeñas, Carlos Nieto, ha lamentado que los productores no se hayan presentado porque, según ha considerado, "estamos ante un año excepcional, de una gran producción porque viene una cosecha importante y para evitar que las parcelas sean descalificadas por exceso de producción, habría que aprobar ese incremento".

El aumento del rendimiento por hectárea del viñedo había sido propuesto por las asociaciones de Asevivaldepeñas y Maestros Bodegueros, ha recordado Nieto, que no entiende cómo los representes de los viticultores no se han presentado, puesto que entiende que "es un aspecto que nos interesa a todos, especialmente a los agricultores, porque puede ser que haya parcelas cuyas uvas se tengan que destinar a vino de mesa o común".