Škoda presenta el Vision E, un anticipo del futuro

Škoda ha presentado su nuevo prototipo, el Vision E, en el Salón de Shangai 2017. Se trata de un SUV de cinco puertas, con una destacable autonomía de 500 kilómetros únicamente con baterías y motor eléctrico. Es el primer vehículo eléctrico de la marca, de un total de cinco que tienen proyectados hasta 2025. De momento, año tras año siguen mejorando sus cifras.

La movilidad eléctrica apunta hacia el presente y el futuro de muchas marcas, por lo que Škoda no se ha querido quedar atrás. La enseña está trabajando arduamente en electrificar su gama, siendo el Vision E la primera piedra de un proyecto que pretende poner la primera piedra, hasta construir un futuro en el que en 2025 Škoda cuente con un catálogo de cinco coches 100% eléctricos.

Exteriormente, el Vision E nos recuerda al Škoda Kodiaq. Tendrá una altura de 1.50m, anchura de 1.97 y longitud de 4.65 metros, por lo que se convierte en un SUV no muy alto, pero considerablemente largo.

Contará con una distancia de ejes de 2.85 metros, lo que consigue un interior espacioso. Además, tiene voladizos en la parte posterior y en la frontal. Como es tradición en los vehículos SUV, los asientos estarán en una posición elevada. En los bocetos oficiales se puede ver un habitáculo moderno, con una pantalla para cada ocupante y una imagen futurista.

En cuanto a la motorización, tendrá 225 kW de potencia en su sistema de propulsión. Como es propio de los vehículos eléctricos, cuenta con una aceleración instantánea muy destacable, con lo que consigue un dinamismo especialmente útil en terreno urbano. La velocidad punta llega hasta los 180 km/h, por lo que los amantes de la velocidad se podrán sentir muy cómodos en el Vision E.

Con la gestión inteligente que incorporan sus dos motores eléctricos, pueden coordinarse para ser muy eficientes y estables, lo que confiere mayor dinamismo y seguridad.

Además, cumple los requisitos para una conducción autónoma de nivel 3, con lo que puede circular de forma independiente en atascos de tráfico, entrar en piloto automático en autopistas, permanecer en un carril y desviarse, buscar aparcamiento, realizar maniobras de adelantamiento y salir de estacionamiento, gracias a sensores y cámaras que lleva integradas.

La movilidad eléctrica de la compañía arranca con la plataforma MEB Group y con el lanzamiento del Škoda Superb, que cuenta con un motor híbrido enchufable. El primer vehículo 100% eléctrico producido en serie se ha anunciado para 2020.