Figueruelas, el Crossland X y una producción de calidad

Figueruelas es una fábrica obsesionada con la calidad, y ello le va a valer una gran consideración en su nueva etapa dentro del Grupo PSA. Con un objetivo de producción de 400.000 unidades para este año, la llegada de los nuevos crossover pequeños del gigante que ha surgido tras la compra más relevante dentro del sector en los últimos años es toda una garantía para una factoría que puede llegar a asumir un volumen de hasta 480.000 coches cada ejercicio y cuyo ritmo creciente de producción ha hecho que el quinto turno este activo. Por cierto, que ellos fueron pioneros en la instauración de esta tanda nocturna allá por 1988.

Una de las señas de identidad de Figueruelas tras 35 años de actividad es que es una fábrica que cuenta con su propia nave de prensado, y es la responsable del 42% de la estampación de Opel. Cuenta con 16 líneas de producción con la tecnología más moderna y realizan más de 300 piezas distintas para sus modelos, con prensas que le permiten producir piezas a base de aluminio. La planta de pintura no se queda atrás ya que en ella las carrocerías reciben hasta 6 tratamientos de anticorrosión y pintura. Su categoría contaminante es de vertidos 0 gracias a las técnicas empleadas y a la transformación de los restos de pintura en energía reutilizable en la propia fábrica.

El lema de los más de 5.400 trabajadores de Figueruelas es “pasión por la calidad”, y el montaje de sus coches se realiza mediante un sistema SPS en el que cada unidad transporta por la cadena sus propias piezas en una caja con el objeto de que los operarios no tengan que desplazarse para buscarlas. En las líneas de producción de Figueruelas ya se pueden ver los nuevos Opel Crossland X (y su hermano el Citroën C3 Aircross) que ya están siendo fabricados a máxima capacidad a pesar de que llegará en Septiembre, puesto que ya admite pedidos.

Ultimate, tecnología para el Crossland X y el Mokka X

En la visita a la factoría que realizamos la semana pasada pudimos comprobar todos estos aspectos de primera mano así como ponernos al volante de este modelo que llega para sustituir al Meriva. Opel ha confirmado que tanto el Crosslad X, como su hermano el Mokka X, que también se fabrica en Figueruelas, tendrán un nuevo acabado tope de gama llamado Ultimate que aúna lo último en conectividad, sistemas de asistencia a la conducción y confort a bordo, todo ello con los motores más potentes de las respectivas gamas.

Entre su equipamiento no falta un sistema multimedia IntelliLink con pantalla táctil en color de 8 pulgadas, faros adaptativos inteligentes ALF LED, el sistema Open&Start para abrir y cerrar el coche sin la llave, la cámara frontal de seguridad Opel Eye con diferentes sistemas de asistencia a la conducción y un año gratis de Opel OnStar con todos los servicios de asistencia en la carretera incluidos. También incluye asientos ergonómicos con certificación AGR, un sistema de sonido premium y llantas de aleación bitono. El precio parte de 24.695 euros en el caso del Crossland X y de 27.900 en el Mokka X.

Aprovechando esta visita a Zaragoza Opel quiso mostrarnos también y por primera vez en vivo en España el nuevo Grandland X, el tercer SUV de su gama que llegará en octubre para competir en el segmento compacto. Toma la plataforma del Peugeot 3008 pero se diferencia con una estética más conservadora, y hará gala de un peso reducido y una eficiente gama de motores. No tendrá tampoco versión de tracción integral, pero un interior refinado prometen una gran experiencia de conducción. Al natural resulta elegante y con muy buena presencia, y su maletero de 515 litros augura buena versatilidad. El nuevo Opel Grandland X ya admite pedidos y su precio de partida es de 25.100 euros.