Los concesionarios piden a las marcas que clarifiquen su política comercial ante la llegada del WLTP
La Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto) ha mostrado hoy su preocupación por cómo trasladarán las marcas a sus redes de distribución los coches afectados por la entrada en vigor del nuevo test de emisiones y consumo WLTP, y pide que clarifiquen su política comercial para los meses de julio y agosto.
El WLTP se aplicará desde 1 de septiembre y a partir de esa fecha, sólo se podrán matricular los coches homologados por este nuevo test, por lo que es previsible que los concesionarios absorban, mediante automatriculaciones, este stock acumulado por los fabricantes.
En lo que va de mes, se han producido 5.141 matriculaciones tácticas, lo que supone un descenso del 24% respecto a las cifras del mismo periodo del año pasado. No obstante, la patronal de los concesionarios espera un fuerte repunte de automatriculaciones en estos tres próximos días hábiles del mes.
Además prevé que se incrementarán de manera muy significativa en julio y, especialmente, en agosto ante la entrada en vigor del WLTP. Faconauto considera que esta situación está provocando incertidumbre, al no conocerse, en muchos de los casos, cuál será la política comercial de las marcas para el segundo semestre del año.
Por ello, ha pedido que los fabricantes, de la mano de las asociaciones de concesionarios, establezcan las condiciones en las que las redes van a absorber, cuando fuera necesario, los coches involucrados.
Además, desde la patronal de concesionarios advierten que, si no se enfoca bien este momento y se sobrecarga el stock, muchos concesionarios tendrán problemas financieros para afrontar su actividad a medio plazo, al mismo tiempo que piden que las marcas no usen la llegada del WLTP para cambiar los objetivos de ventas previamente pactados.
“Esperamos que las marcas actúen con racionalidad y consensuando con los concesionarios la matriculación de estos vehículos. La entrada en vigor de la WLTP es una buena noticia para el sector, pero ha de gestionarse de tal manera que favorezca a los compradores, a los fabricantes y, como no, a los concesionarios. Las redes de distribución están dispuestas a arrimar el hombro, como siempre han hecho, pero las marcas han de ser muy escrupulosas y no poner en peligro la estabilidad financiera de los concesionarios”, señaló el presidente de Faconauto, Gerardo Pérez.