Volkswagen T-Cross, la alegría de Landaben
Dedicada en exclusividad al Polo desde 1984, la estabilidad laboral derivada del acuerdo de convenio colectivo alcanzado entre UGT, CC.OO. y la dirección de la compañía hace unos meses ha sido una pieza clave en la llegada del segundo modelo a las líneas de fabricación de Landaben. El Volkswagen T-Cross está siendo además todo un éxito, y en el último mes acumula 1.650 pedidos, razón por la cual, aunque sólo se fabrica en una línea, ya esté suponiendo cerca del 50% de los coches que salen en dirección a los concesionarios.
Esa cifra se va a ir este año por encima de las 320.000 unidades, de las que el 90% serán exportados, y el 45% de ellos tendrán la nueva carrocería SUV urbana sobre la plataforma modular transversal (MQB) que ambos modelos comparten. La llegada del T-Cross a Landaben ha supuesto una inversión de 1.000 millones de euros hasta 2021 con los que se ha garantizado el futuro de los casi 5.000 empleos directos, apuntaba el presidente de Volkswagen Navarra, Emilio Sáenz.
"Estamos muy orgullosos de ser la planta líder a nivel mundial tanto de Polo (también se fábrica en Sudáfrica, China y Latinoamérica) como de T-Cross (China, Shanghái y Sudamérica)", ha añadido el directivo. El T-Cross permite a Volkswagen ofrecer un SUV en cada uno de los segmentos del mercado y completar así su ofensiva de este tipo de modelos, ya que su gama de todocaminos está integrada en estos momentos por el T-Roc, Tiguan, Tiguan Allspace y Touareg.
Con las buenas noticias que supone todo esto hay quien nunca se da por satisfecho, y en nuestra visita a la fábrica esta semana algunos colegas de la prensa preguntaban ya que para cuando llegaría un tercer modelo, a lo que Laura Ros, la directora de la marca en España, contestaba que hay que "tener paciencia”, pues de momento no hay nada que anunciar al respecto. Es más, Herbert Diess, consejero delegado del consorcio automovilístico alemán, ya avanzó en el pasado Salón Internacional del Automóvil de Ginebra que, de momento, no tiene mucho sentido la adjudicación de un tercer modelo a la planta navarra.
Frescura SUV y gama completa
Además de visitar la planta, nos hemos puesto al volante del nuevo Volkswagen T-Cross, que mantiene todo el agrado de conducción del Polo y se puede elegir con dos motores de gasolina (1.0 TSI de 95 CV y cambio manual de 5 velocidades, y 1.0 TSI de 115 CV con cambio manual de 6 velocidades ó de doble embrague DSG de 7 velocidades) y uno diésel, el 1.6 TDI de 95 CV. Más adelante está prevista la incorporación de una tercera opción gasolina, el 1.5 TSI de 150 CV, pero de momento no se plantea la llegada de ninguna versión de GNC (Gas Natural) que pueda tener lucir la etiqueta ECO. Tampoco habrá variante con tracción integral 4Motion.
De serie, gracias a la plataforma MQB, incorpora sistema de vigilancia Front Assist (con sistema de detección de peatones y función de frenada de emergencia en ciudad) y de aviso de salida del carril Lane Assist. También asistente de arranque en pendiente, protección proactiva de los ocupantes y asistentes de ángulo muerto y de salida del aparcamiento. El interior destaca por su amplitud y la versatilidad de su banqueta trasera corrida, pero nos llama la atención que no pueda montar techo practicable ni que se pueda optar por la pintura bicolor, dos opciones muy demandadas a la hora de ahondar en la personalización de un coche que se prestaría mucho a ello. A la venta desde 18.990 euros, hay tres acabados y atractivos paquetes para ahorrarse hasta 1.200 euros en equipamiento opcional.