Un altísimo cargo de la región durante 27 años lleva a Sánchez a la victoria (por segunda vez)

Una de las cuestiones que más han ilusionado a los seguidores de Pedro Sánchez ha sido la posibilidad que se abre de renovación del partido y de los cargos que les representan en las instituciones. Que ha llegado la hora de la militancia, tal como proclaman los “pedristas”, quiere decir que todos los afiliados van a decidir y a mandar y que pierden influencia y poder los barones, la gente del aparato y así. No se ocultan los tintes demagógicos de estas propuestas que han comprado un gran número de veteranos del PSOE, a pesar de que muchos de ellos han vivido de la política durante años. En Castilla-La Mancha hay varios ejemplos de históricos socialistas que han apoyado con entusiasmo a Sánchez en contra del aparato al que pertenecieron alguna vez y donde nunca renunciaron a sus ventajas ni reclamaron mayor protagonismo de los afiliados. Eran otros tiempos.

Uno de esos casos, aunque con matices distintos, es el de José Sanroma, el que fuera presidente del Consejo Consultivo de Castilla-La Mancha durante veintisiete años consecutivos. Sanromá, apodado “Camarada Intxausti” cuando era maoísta y lideraba la Organización Revolucionaria de los Trabajadores (ORT), se pasó al PSOE en 1990 y seis años más tarde fue nombrado presidente del Consejo Consultivo a propuesta del Gobierno de José Bono. Veintisiete años más tarde, en 2013, con Cospedal al frente de la Junta, el abogado daimieleño dejó el cargo con la edad de jubilación sobrepasada. Hace dos años Pedro Sánchez le fichó para el Consejo para la Reforma Constitucional, un órgano interno promovido por el PSOE, después de que hubiera participado en la campaña de primarias que llevó a Schz a la Secretaria General. En aquella aventura coincidió con otros dos castellano-manchegos mucho más jóvenes como eran Javier Rueda y José Luis Fernández “Chunda”. Cada uno ha seguido sus propios derroteros posteriormente viviendo desde posiciones distintas los convulsos acontecimientos del PSOE de los últimos años.

El único que ha seguido en el entorno más próximo y colaborando con Pedro Sánchez ha sido Sanroma, que ha formado parte del equipo de campaña que ha derrotado este domingo a Susana Díaz y a los barones regionales, entre ellos el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page. Sanroma aparece en la imagen (1i) que ofrecemos y que ha sido publicada en las redes sociales por la diputada balear Sofía Hernanz Costa. Es el equipo de campaña de Sánchez, el núcleo duro del reelegido líder socialista y el eficaz motor de su éxito.