El singular espacio creado en un cementerio de Castilla-La Mancha no tiene precedentes
Se trata de una iniciativa pionera y original que tiene un admirable objetivo y una buena causa: ayudar a las familias a sobrellevar el duelo cuando se pierde un bebé durante la gestación. El proyecto se ha puesto en marcha en el cementerio municipal de la localidad ciudadrealeña de Manzanares y consiste en la creación de un nuevo espacio al que los padres y familias que han sufrido la pérdida de un bebé en gestación pueden acudir para ayudarles en su duelo.
La iniciativa no tiene precedentes en Castilla-La Mancha y ha sido llevada a cabo por el Ayuntamiento de Manzanares a petición del Hospital "Virgen de Altagracia" de esta localidad manchega. Está pensado para facilitar el duelo a todos aquellos que han sufrido la pérdida de su bebé durante el periodo del embarazo.
El espacio creado en este cementerio está formado por un olivo con mariposas y dos bancos y parte de una idea trasladada al Ayuntamiento desde el citado hospital del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha a raíz de las demandas recibidas en el centro sanitario. Así lo ha explicado la responsable de la Gerencia de Atención Integrada de Manzanares, Nuria Martín, quien ha manifestado que "cada persona vive el duelo a su manera, pero hacer que este acto íntimo se convierta en un hecho social facilita el proceso".
"Fue el tiempo que pasaste con tu rosa lo que la hizo tan importante", es la frase de 'El Principito' que se puede leer en la placa instalada al efecto. "Un lugar dedicado a esas hermosas estrellas que nos dejaron antes de tiempo y que nos iluminan en el cielo y que está pensado para facilitar el duelo a todas aquellas personas que hayan sufrido la pérdida de su bebé durante el periodo de gestación", han indicado desde el Consistorio.
Este nuevo espacio del cementerio de Manzanares ya está funcionando y a su inauguración ha asistido el alcalde de Manzanares, Julián Nieva, acompañado por el concejal de Sanidad, Juan López de Pablo, y la concejala de Obras, Isabel Díaz-Benito. Es el primero de su características en Castilla-La Mancha y es previsible que, a partir de este singular proyecto, se desarrollen otros similares en la región.