Editorial

El Corpus gana esplendor en Toledo, una ciudad cada día más atractiva

15 junio, 2017 00:00

Sentimos que la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, no pueda participar en la procesión del Corpus Christi de este jueves. Lo sentimos por la ciudad, que pierde así a su máxima representante en el esplendoroso desfile procesional, y lo sentimos por ella conociendo sus profundas convicciones y su arraigado toledanismo. Un problema de salud derivado de un pequeño accidente de tráfico que sufrió hace unas semanas la obligarán a guardar reposo mientras desfila la Custodia de Arfe con todo su cortejo por las engalanadas calles de Toledo, que lucen estos días la magia de su barroca y multicolor ornamentación bajo la sombra imposible de la lona de sus toldos. Con Milagros Tolón como alcaldesa, cargo en el que ha cumplido este martes su segundo aniversario, y después de dos décadas de sólido desarrollo, especialmente notable en los últimos años, la ciudad que fue de las Tres Culturas vive el mejor momento de su historia contemporánea. Y además con unas magníficas expectativas de futuro.

La capital castellano-manchega se mantiene arraigada a antiguas tradiciones culturales, sociales y religiosas que forman los pilares de su idiosincrasia mientras se abre al mundo y a la modernidad impulsada por la economía del turismo y las nuevas tecnologías. Esa es una realidad incontestable que impulsará de forma espectacular una nueva etapa de desarrollo a poco que se concreten proyectos de futuro tan espectaculares como Le Puy du Fou. Es importante que las distintas administraciones preparen las infraestructuras necesarias para hacer frente a estos nuevos tiempos que se le avecinan a la ciudad. En ello están, con el equipo municipal de gobierno de Milagros Tolón a la cabeza. En circunstancias tan favorables, y con una fiesta tan grande como el Corpus, no es extraño que la alcaldesa sufra lo indecible por no poder vivir los festejos en la calle con sus conciudadanos y con las miles y miles de personas que la visitan estos días. Toledo está de moda y el ayuntamiento está contribuyendo poderosamente a potenciar su extraordinario atractivo.