Ciudadanos ha puesto en marcha un interesante proceso de reorganización interna en Castilla-La Mancha del que puede salir reforzado como partido y con una nada desdeñable proyección de futuro en la región. El partido de Albert Rivera está tomando importantes decisiones internas para fortalecer sus estructuras y, en el caso de Castilla-La Mancha, parece haber apostado por intentar convertirse en un partido decisivo en la vida pública regional y hacerlo, además, con Orlena de Miguel como líder indiscutible y candidata a la Presidencia de la Junta en las próximas elecciones autonómicas.

Este proceso interno emprendido por Ciudadanos llega en un momento clave en Castilla-La Mancha, ya que, como todo el mundo sabe, la legislatura se ha complicado sustancialmente y no se descartan elecciones autonómicas anticipadas después del verano. La apuesta de este partido por fortalecerse coincide con un periodo convulso en la política castellano-manchega del que, en todo caso, va a salir un nuevo escenario regional haya o no anticipo electoral, de manera que Ciudadanos quiere estar fuerte ante lo que pueda pasar en esta segunda parte de la legislatura en Castilla-La Mancha.

Orlena de Miguel es una dirigente política todavía con poca experiencia pero con las ideas muy claras y un futuro muy prometedor, de manera que Ciudadanos está tomando posiciones para tener vida propia y protagonismo en el nuevo escenario político que se vislumbra en Castilla-La Mancha, ya sean las próximas elecciones dentro de pocos meses o se celebren finalmente en mayo de 2019, que es cuando tocan en su recorrido natural. Es verdad que a este partido le queda aún mucho recorrido para mejorar sus posiciones, pero parece que puede tener un buen futuro por delante en la región.