Editorial

Buenas noticias del paro para empezar el año en Castilla-La Mancha

4 enero, 2018 00:00

Castilla-La Mancha tiene actualmente veinte mil parados menos que hace un año. Nuestra región ha terminado el año 2017 con un total de 178.569 desempleados, una cifra demasiado elevada pero que supone casi un diez por ciento menos de parados que al cierre de diciembre de 2016. Los castellano-manchegos que aún no tiene un empleo son muchos y la cifra global de parados de la región es difícil y penosa de asumir, pero la tendencia general de esta legislatura apunta a la esperanza: mejora del mercado laboral, más ocupación y menos paro.

El año 2018 comienza, por tanto, con buenas perspectivas. En España también ha bajado significativamente el paro en el último año, llegando a situarse en la actualidad el número de desempleados en 3.412.781, es decir 290.193 parados menos que al cierre de diciembre de 2016. Castilla-La Mancha está enganchada del ritmo económico nacional y registra también buenos indicadores.

La economía nacional y regional están creando empleo desde hace muchos meses y eso es una magnífica noticia, al margen de que siga habiendo problemas graves de precariedad, bajos salarios y poca estabilidad en el mercado laboral. Problemas que habrá que subsanar y a los que es necesario y urgente atender, pero que no deben ocultar la positiva tendencia que hemos alcanzado.

Conviene, por tanto, mantener el optimismo como un estado de ánimo necesario para ir logrando metas, independientemente de que es importante instar al Estado y las comunidades a que, a la vez que se crea empleo, generen a la mayor brevedad posible las condiciones de dignidad laboral, estabilidad y salarios que reclaman los españoles y los castellano-manchegos con tanta urgencia como ansiedad. El Gobierno de Castilla-La Mancha puede estar razonablemente satisfecho, pero ni conforme ni contento. Y mucho menos autocomplaciente.