PASADOS CUARENTA AÑOS. Los constituyentes toledanos (II)
Los resultados electorales en aquella primera elección no se conocieron con la rapidez con que los conocemos ahora. Quizá aquel primer fallo, que he visto reconocer recientemente al Ministro de la Gobernación del momento Rodolfo Martín Villa, hace que ahora seamos uno de los países democráticos donde más pronto y con mayor precisión se conocen los resultados electorales.
Estaba bien entrada la mañana del 16, cuando, al fin, el Gobierno Civil de Toledo, pudo dar con certeza los parlamentarios que habíamos resultado elegidos.
Dormí en mi pueblo poco aquella noche, pues había estado hasta tarde en Talavera con los compañeros interventores y apoderados (el triunfo de nuestras siglas en Talavera fue clamoroso). Pero se me acercó para felicitarme, antes de salir para Toledo, una maestra ya jubilada, la primera felicitación, que me contó -nunca lo hubiera imaginado-, que por republicana había sido depurada y destinada a una aldea del Pirineo. El miedo de la dictadura. Por supuesto había votado al PSOE.
Correspondía elegir en nuestra provincia 5 Diputados y 4 Senadores. El partido más votado en el Congreso resultó ser la UCD, que obtuvo dos escaños para Rafael Arias Salgado y Gonzalo Payo. El PSOE obtuvo otros dos que correspondieron a Jerónimo Ros Campillo y Manuel Díaz Marta y finalmente ALIANZA POPULAR obtuvo el quinto para Licinio de la Fuente, si bien este escaño estuvo oscilando entre AP y UCD a lo largo de toda la noche.
Pero en el Senado los dos candidatos socialistas resultamos los más votados. El primer escaño del Senado le correspondió a Gregorio Peces Barba y el segundo a mí. Detrás siguieron dos candidatos de UCD, Fernando Chueca Goitia y Fernando Rojas Gómez. El misterio de por qué en el Senado el PSOE había obtenido más votos que UCD, al contrario que en el Congreso, tenía una fácil explicación. El Partido Comunista había presentado un solo candidato al Senado y pidió el voto para los dos candidatos socialistas. Nosotros también pedíamos, tímidamente, el voto en el Senado para el candidato comunista, pero no todos nuestros electores siguieron nuestra consigna. No obstante Trinidad García Vidales, su candidato, obtuvo muchos más votos que el PCE en el Congreso.
Al mediodía, el Gobernador Civil, Sr. Pérez de Lama, acudió al hotel donde nos alojábamos para felicitarnos a los parlamentarios socialistas recién elegidos. Buen detalle por parte de este hombre que había actuado con gran corrección en todo el proceso electoral.
Rafael Arias Salgado, pertenecía al Partido Socialdemócrata de Fernández Ordoñez. Cómo vino a caer en Toledo tiene una sencilla explicación; no cabía en la lista de Madrid en puesto de salida. Y Fernández Ordoñez puso el grito en el cielo y hubo que darle una cabecera segura y cercana a la capital. Rafael Arias, fue luego Ministro con Suárez. A diferencia de su jefe de filas Fernández Ordoñez, no pasó luego al PSOE sino al PP, donde fue Ministro de Defensa y de Fomento con Aznar. Pero en su etapa como Ministro y parlamentario por Toledo, es preciso reconocer que estuvo presente en la provincia. No había fin de semana en que no tuviera algún acto en algún pueblo, lo que nos obligaba a los que estábamos en la oposición a multiplicarnos para tratar de contrarrestar el desembarco ministerial. Junto con Gonzalo Payo, su hombre de confianza, crearon un partido eficaz y bien organizado. Nunca serán conscientes del mal que hicieron a España los que desde dentro acabaron con la UCD.
El recordado Gonzalo Payo, era por el contrario toledano de Pulgar, y hombre de prestigio en la ciudad donde dirigía el Observatorio Geofísico Central. Poeta y escritor, pensó pronto en dirigir sus pasos hacia la gestión pública siendo presidente de la Diputación Provincial de Toledo y el segundo presidente del Ente Preautonómico de nuestra Región.
Jerónimo Ros Campillo, el primer parlamentario del PSOE, era un prestigioso médico de Toledo donde dirigía el hospital de la Virgen del Valle, dependiente del Patronato Antituberculoso. Su incorporación temprana al socialismo toledano dotó a nuestro partido de gran prestigio. Jerónimo, que a sus noventa años todavía salió el pasado día 21 de mayo a votar en las primarias que han permitido elegir a Pedro Sánchez Secretario General del Partido, pertenece a esa categoría de médicos socialistas que siempre tuvieron una gran importancia en el desarrollo de nuestras ideas porque siempre estuvieron los primeros defendiendo el socialismo. Médico y socialista, sus pacientes de muchas zonas de la provincia, lo aclamaban en los mítines y los demás compañeros apreciaban su palabra clara, directa y comprometida.
El segundo diputado socialista era Manolo Díaz Marta Pinilla. Toledano de la calle Ancha, venía del exilio de Méjico. La biografía personal de Díaz Marta daría para una apasionante novela. Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, empezó a trabajar en el Ministerio de Indalecio Prieto en los llamados regadíos del Guadiana, que luego Franco aprovechó para inaugurar y se conocieron como Plan Badajoz. Comandante durante la guerra civil, salió herido para el exilio en Méjico, donde rehízo su vida y trabajó de consultor de las Naciones Unidas para temas de agua, donde destacó notablemente. Cuando se planteó el trasvase Tajo-Segura, estuvo siempre radicalmente en contra y defendió con la pluma y numerosos escritos su firme oposición al trasvase, animando a los toledanos a oponerse rotundamente al mismo. Hombre entrañable, desarrolló una importante labor en el Parlamento en los temas de Obras Públicas, además de en su oposición al trasvase, poniendo al servicio del Partido y de los compañeros diputados sus enciclopédicos conocimientos sobre su especialidad. Se permitió una indisciplina en el debate constitucional, pues votó a favor de la República. No lo podía remediar me dijo, pero el grupo parlamentario no le puso ninguna multa.
Don Licinio de la Fuente era también un toledano de Noez. Abogado del Estado, había desempeñado numerosos cargos durante el franquismo llegando a ser Ministro de Trabajo y Vicepresidente del Gobierno del Gobierno de Franco. Es de justicia reconocer que en sus diferentes puestos siempre procuró favorecer a la provincia de Toledo con numerosas instituciones que se instalaron por estas tierras. En la votación sobre la Constitución se abstuvo.
Pasando ya al Senado, el primer senador elegido en nuestra provincia fue Gregorio Peces Barba del Brío, que aunque había nacido en Madrid su padre era de Sonseca. Recuerdo que durante la campaña visitábamos con frecuencia a un tío suyo que vivía en Toledo. Gregorio era sobre todo un prestigioso jurista. Al terminar la carrera de Abogado en la Universidad Central, se incorporó al Partido Socialista. Durante la guerra civil desempeñó el puesto de fiscal en diversas unidades militares lo que le valió una condena a muerte que le fue conmutada por la de cadena perpetua, Obligado a trabajar durante el cumplimiento de su condena en las obras faraónicas del Valle de los Caídos, recordaba aquello etapa con su fino humor. Su prestigio como abogado fue determinante en su trabajo en las Cortes Constituyentes, en la Comisión de Justicia, pues además de hacer la Constitución hubo que modificar importantes leyes que veníamos arrastrando de la dictadura. Su buen hacer en este campo es preciso resaltarlo adecuadamente.
Don Fernando Chueca Goitia fue el tercer senador por nuestra provincia. Prestigioso arquitecto, era miembro del partido liberal. Aunque tras la guerra se le prohibió ejercer su profesión durante algunos años, pronto ganó la cátedra de Historia de la Arquitectura y Urbanismo de la Escuela de Arquitectura de Madrid. Son numerosos los monumentos que se deben a su iniciativa y su saber. En las Cortes era bien respetado por su liberalismo y por su amplia cultura como historiador de la Arquitectura.
Fernando Rojas Gómez era un profesor toledano perteneciente al Partido Demócrata Popular. Presidió la Comisión de Educación y Cultura del Senado constituyente y participó también activamente en los temas educativos en el debate constitucional.
Y finalmente el que esto escribe, segundo senador en número de votos por nuestra provincia de Toledo. Nací en Herreruela de Oropesa, estudie el Bachillerato en Talavera y Magisterio en la Normal de Toledo. Me licencié luego en Ciencia Políticas y Derecho en la Universidad Complutense. Cuando fui candidato al Senado era ya funcionario del Estado con destino en el Ministerio de Educación y Ciencia. Luego en el Senado tuve la enorme fortuna de que mis compañeros me eligieran Portavoz del Grupo Socialista del Senado, lo que me permitió participar activamente en la elaboración de la Constitución, llegando a ser miembro de la Comisión Mixta Congreso-Senado que elaboró el texto final que fue sometido al voto de los ciudadanos.
Cuarenta años después, en estas fechas de tan gratos recuerdos para los que allí estuvimos, creo que cumple rendir homenaje a los constituyentes toledanos que ya nos dejaron: Payo, Díaz Marta, Licinio de la Fuente, Peces Barba del Brío y Chueca Goitia. Fueron unos dignos representantes de las gentes de Toledo, en una época importante de la historia de España.
Francisco Ramos Fernández-Torrecilla Senador elegido por Toledo el 15 de junio de 1977