Castilla-La Mancha, con Page y Podemos, va mal, muy mal
Obras son amores, y no buenas razones, dice el conocido refrán que hoy cobra gran sentido al mirar la gestión del Gobierno de Castilla-La Mancha en los tres últimos años. Y es que, por desgracia, nuestra región está viviendo, con Page y Podemos, las consecuencias de los engaños e incumplimientos permanentes de este bipartito de perdedores. La falta de credibilidad, la incertidumbre y la frustración en los castellano-manchegos son los resultados de estas irresponsables políticas.
El pasado sábado, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, anunció que iba a realizar un balance de los tres años de su gestión. Pero todo quedó en eso, en un anuncio. Fue incapaz de decir lo que había hecho esta legislatura, y se limitó a rodearse de sus asesores y altos cargos –que, por cierto, son muchos-, para realizar un discurso de rencor, de retrovisor y de anuncios. Pero Castilla-La Mancha a Page se le olvidó.
A Page se le olvidó explicar a los ciudadanos por qué en marzo fuimos la única región en la que se generó paro, por qué 22.000 castellano-manchegos engrosaron las listas del paro según las dos últimas Encuestas de Población Activa. Y se le olvidó exponer por qué Castilla-La Mancha crece un 30% menos que la media nacional.
A Page se le olvidó explicar por qué, a pesar de haber recortado 1.300 millones en 2016 y 2017 en servicios que se prestan a los ciudadanos, somos la segunda región con más deuda y más déficit. Y se le olvidó exponer cómo la subida de impuestos, por su pacto con Podemos, está generando la fuga de empresas a comunidades vecinas y la pérdida de oportunidades.
A Page se le olvidó contar que debe 500 millones a nuestros agricultores y ganaderos. Y se le olvidó explicar por qué no declara la plaga de conejos, que está arrasando los cultivos y arruinando a miles de familias de nuestra región, con unos daños que superan los 600 millones de euros.
A Page se le olvidó exponer por qué somos la segunda región con peores listas de espera sanitarias y por qué las está maquillando y ocultando, en lugar de trabajar por solucionarlas. Y se le olvidó explicar por qué ha quitado 4.000 ayudas a familiares de dependientes; un colectivo que ya ha manifestado su preocupación ante el abandono de este Gobierno regional.
A Page se le olvidó decir que ha vuelto a incrementar el abandono escolar temprano, ese que con tanto esfuerzo el anterior Gobierno del PP logró reducir en diez puntos. Y se le olvidó también explicar por qué ha sido el primer presidente que ha cerrado tres colegios públicos, y por qué ha realizado una campaña de descrédito contra la Universidad de Castilla-La Mancha.
Pero los ciudadanos sí recuerdan estos “olvidos” de Page. Los castellano-manchegos, -que con tanto esfuerzo sacaron nuestra región adelante del pozo en el que nos dejó el anterior Gobierno socialista en 2011-, sí tienen presente la deriva a la que Page y Podemos nos vuelven a llevar.
Detrás de cada incumplimiento, de cada mentira y de cada engaño de Page y Podemos está la incapacidad de un bipartito de perdedores para gestionar nuestra tierra, para colocar a nuestra región en el lugar que se merece.
No podemos consentir que Page nos vuelva a situar en el furgón de cola de la recuperación, del empleo y de la prestación de los servicios sociales, volviendo a las peores épocas en las que nos colocaron los anteriores gobiernos socialistas de nuestra región. No podemos tirar por la borda el esfuerzo de tantos castellano-manchegos para, en la anterior legislatura, colocar a nuestra tierra en el camino del crecimiento económico y la creación de empleo.
Usted, señor Page, que abrazó y metió en su Gobierno a Podemos, que se encuentra tan cómodo con Podemos, nos lleva a la ruina económica y social a los castellano-manchegos.
Señor Page, Castilla-La Mancha no se lo merece. Tampoco se lo merecen los castellano-manchegos. Usted debe anteponer los intereses de los ciudadanos al suyo propio y a mantenerse en su sillón a costa de un pacto que está lastrando el futuro de nuestra tierra.
Antonio Lucas-Torres. Diputado regional del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes de Castilla-La Mancha y alcalde de Campo de Criptana (Ciudad Real)