Los grandes inventos del TBO
Los grandes inventos del TBO fue una sección humorística de gran éxito incluida en las páginas del cómic de editorial Bauzá. Cada semana, el profesor Franz de Copenhague desarrollaba inventos estrafalarios, sumamente complejos en ocasiones, con una finalidad banal y absurda. Por la sección desfilaron varios dibujantes, alguno de ellos con formación académica en mecánica, lo que en ocasiones otorgaba cierta credibilidad al montaje. En sus páginas pudimos descubrir el dispositivo para hacer vino con zapatos viejos, otro que limpiaba las narices, sombreros jaula, o un dispositivo para evitar la caída del cabello en la sopa, entre otros artilugios estrambóticos. La sección desapareció con el final de la publicación, aunque su popularidad ha llegado a calar en el lenguaje coloquial. La frase “es un invento del TBO” se sigue utilizando con cierta frecuencia para calificar cualquier idea de estrafalaria o absurda.
Podemos, a través de su secretario general en Castilla-La Mancha e incluso vicepresidente de la Junta de Comunidades, José García Molina, acaba de presentar nueve medidas para el desarrollo económico y social de la región para 2019. Unas disposiciones que el político está convencido de que serán recibidas por la ciudadanía “con buen talante”. Haciendo un repaso por los “grandes inventos de García”, me ha llamado la atención especialmente el denominado “Invitando”, en la que Podemos pretende que los ciudadanos y familias de este país -supongo también que los de Cataluña- pasen en Castilla-La Mancha un fin de semana gratis total de alojamiento en las casas de los castellano-manchegos que gentilmente la ofrezcan para la ocasión. Un proyecto que como dice el presentador es “bonito, ingenioso, y no cuesta nada”. En efecto, bonito por el incomparable destino que se visita -Castilla-La Mancha-, ingenioso aunque igualmente merecedor de figurar dentro de la famosa sección del TBO y, desde luego, tan económico para los viajeros.
Dar de beber al sediento y posada al peregrino son obras de misericordia y hospitalidad debida recogidas en los libros de cristiandad, unos textos donde difícilmente hayan acudido los señores de Podemos para redactar estas singulares medidas. Un proyecto que contempla una especie de pisos turísticos u hospitalidad colaborativa gratis total que, más que fomentar “vinculo con la región”, agranda todavía más el problema de la turistización que ya sufren algunas ciudades de esta comunidad, además de competir deslealmente con hoteles, casas rurales, albergues, y cualquier otro tipo de establecimiento turístico. Un acogimiento similar al que ya se desarrolla cada año en la capital regional con los poetas de Voix Vives, y no precisamente con la armonía, resultados, y convivencia ocupacional que asegura García Molina.
La fecha que pretende Podemos poner en funcionamiento todas estas medidas se sitúa en 2019. Una fecha electoral donde los castellano-manchegos habrán tenido tiempo para reflexionar sobre algunas de las absurdas fórmulas que esta formación nos propone con tanta frecuencia para el desarrollo económico y social de Castilla-La Mancha. Una región que, en efecto, precisa con urgencia medidas eficaces, pero realistas, para su crecimiento y progreso. En absoluto otras que merecen los honores de figurar en la sección de Los grandes inventos del TBO.