La Pregunta

¿Qué hacía Paquirrín el lunes en la tele regional y por qué hay que pasear al guapo hombre del tiempo?

29 noviembre, 2017 00:00

La exitosa jornada sobre las consecuencias del cambio climático y la sequía que se han celebrado este lunes en la televisión pública de Castilla-La Mancha no fue ni la única ni principal protagonista del día en las dependencias de CMMedia del polígono de Toledo.

Algunos de los asistentes, embebidos de una gran dosis de información sobre precipitaciones, temperaturas, isobaras y demografía ofrecida por un grupo solvente de expertos climatólogos, meteorólogos, geógrafos y periodistas especializados se tuvieron que frotar los ojos al coincidir fugazmente en el hall de la televisión autonómica con un personaje muy mediático y de actualidad: Francisco José Rivera, o lo que es lo mismo: Kiko Rivera… o Paquirrín, el popular retoño de Isabel Pantoja y el recordado diestro Francisco Rivera.

El hijo de la cantaora, que años atrás estudió (o al menos estuvo interno) en el colegio Mayol de Toledo, vino a la capital castellano-manchega para presentar su último disco en el programa de radio de Eva Carrasco “Aquí hay duende”. Aprovechó para contar a los oyentes su nueva experiencia como DJ.

Kiko, con su inconfundible frente despejada, gorra con visera trasera y enorme tatuaje en el brazo izquierdo, asistió también al magazine de la mañana “Estando Contigo”, que dirige Vicente Serrano, para  mover el esqueleto con el play back de su última pieza: “Quítate el Top”.

La chirigota, no obstante, no concluyó el lunes con la presencia de Paquirrín, sino con el comentario de algún periodista al Jefe de la sección de Meteorología de la Casa, el alto y atractivo Carlos Macías (en la imagen de la derecha).

Fue acabar la jornada sobre la sequía y por la noche empezó a “chispear” en algunos puntos de Castilla-La Mancha. Algún compañero avispado ha sugerido que en vez de sacar a vírgenes y patronos locales de paseo, se saque en procesión al “tío buenorro del Tiempo”. Si no llueve, al menos su sola presencia merecerá la pena.