¿Está en la ruina la empresaria con más fincas en la provincia de Toledo?
Asunción Fernández con Toni Blair y Luis Miguel Rodríguez en un acto de la Fundación Barreiros hace algunos años
"Una empresa chipriota está detrás de los graves problemas financieros que están asfixiando poco a poco el famoso negocio de Luis Miguel Rodríguez García-Rivera, dueño de Desguaces La Torre y conocido en el sector como 'el rey de la chatarra'. Slomber Holdings Limited, un fondo de inversiones internacional que tiene su base en Chipre, forzó el concurso de acreedores del desguace madrileño (uno de los más grandes de Europa), decretado el pasado 10 de julio por el juzgado de lo mercantil número 12 de Madrid. Rodríguez, últimamente un habitual del papel cuché por sus relaciones con Carmen Martínez Bordiú y Ágatha Ruiz de la Prada, recurrió a los chipriotas para que en 2013 le prestaran 5,3 millones de euros con los que construir un museo del automóvil". La noticia la dio ayer El Confidencial y no tendría mayor relieve para nosotros si no fuera porque la mitad de la empresa del "chatarrero" es de una toledana, María Asunción Fernández López, exmujer de Luis Miguel y madre de sus dos hijas.
Luis Miguel Rodríguez García es el dueño del mayor centro de reciclaje de coches de Europa -Desgüaces La Torre-. Pero además es el dueño de una enorme finca situada en el término de la localidad toledana de Nambroca lindante con los terrenos de la zona residencial del Polígono de la capital castellano-manchega. Por eso es todavía habitual encontrarle desayunando, solo o acompañado, en alguno de los bares de Nambroca. La finca, situada en la dehesa de Las Nieves, está a nombre de la empresa llamada La Casa Grande Aceite de Oliva, SL, una sociedad en la que Rodríguez García comparte las acciones al cincuenta por ciento con su exmujer. Es una singular relación en la que no pervive el amor pero sí el interés común en los negocios que comparten.
El “rey del desguace” no pasa por su mejor momento económico, pese que, junto a su exmujer, conserva un importante patrimonio, destacando la finca de Nambroca, una propiedad que ronda las 66 hectáreas y que según el catastro tiene más de 2.500 metros cuadrados de vivienda, más almacenes. Allí tiene también el “chatarrero” su impresionante colección de automóviles, entre ellos aquel en el que viajaba José María Aznar cuando sufrió el atentado de ETA. Además, la sociedad posee en la provincia de Toledo más de 60 fincas en las localidades de La Guardia, El Romeral, Tembleque, Lillo, Illescas, Villacañas, Pantoja, Alameda de la Sagra, Borox, Añover de Tajo, Cobeja, Esquivias, Yeles, Seseña, Villamuelas y Villasequilla. Este cúmulo de propiedades les convierte probablemente en unos de los mayores terratenientes de Castilla-La Mancha.
A las deudas millonarias acumuladas con Hacienda, se unen ahora las deudas con uno de sus principales acreedores. Según El Confidencial, Rodríguez aceptó unas condiciones leoninas de los prestamistas chipriotas: "Un interés del 18% al que se sumó un interés adicional moratorio del 25%, este último una especie de sanción por el incumplimiento contractual y en el retraso en la devolución del pago. La deuda con el fondo se ha elevado así cinco años después hasta los 11.289.000 euros, de los que 5.989.000 son intereses. Uno de cada cuatro euros que debe Rodríguez se lo adeuda a los chipriotas. La deuda total de Desguaces La Torre, según la masa del concurso, es de 44.069.865 euros".
De todas formas Hacienda es el principal acreedor. Tal como recoge el periódico de Nacho Cardero, "los desguaces deben al fisco español 21,9 millones de euros, aunque el último listado de morosos hecho público por la Agencia Tributaria rebaja la cifra a 15,4 millones. Después está el fondo chipriota, con esos 11,2 millones de euros. El Banco Santander también reclama 4,4 millones y la Seguridad Social, 1,33 millones. Luego está Norton Edificios, con una deuda de 412.317 euros. Con todos ellos, Desguaces La Torre tiene estructurado un calendario de pagos".