¿Cómo ha vivido el PP-CLM el debate del estado de la región de Paco Núñez?
El Grupo Parlamentario Popular ha vivido con intensidad y alivio el debate del Estado de la región al entender que las intervenciones del nuevo presidente del partido, Paco Núñez, han estado a gran altura y ha hecho frente a Page de forma brillante, con contundencia y con numerosas propuestas para el futuro de Castilla-La Mancha, según han expresado algunos de los diputados “populares” a este diario. Estas mismas fuentes se han mostrado muy satisfechas por el resultado del debate porque, entre otras muchas cosas, ha permitido visualizar la figura de un nuevo líder del partido apenas unas semanas después de haber sido elegido como presidente y habiendo tenido que afrontar un reto de estas características.
Y eso, aseguran, a pesar de haber coincidido con un momento delicado para el PP a nivel nacional y regional debido a la publicación de las grabaciones del excomisario Villarejo, que las tres últimas jornadas han afectado de lleno a María Dolores de Cospedal. Alguno de nuestros interlocutores, afinando en el análisis de lo ocurrido, considera que ha resultado tan favorable para los intereses políticos del PSOE regional y de Page que dudan de que la coincidencia de fechas haya sido mera casualidad. Pero eso es otra historia.
La realidad es que el PP, pese a las circunstancias, ha superado el trámite del debate con buena nota y Paco Núñez ha demostrado que conoce la región, que tiene proyecto propio y que sabe defenderlo en la tribuna. Además dispone de tiempo por delante para matizar, depurar y afianzar su proyecto y su discurso. No creemos que Page esté cansado o haya dejado de tener interés por Castilla-La Mancha, como han repetido de forma insistente desde las filas del PP, y especialmente el propio Núñez, pero sí llevan razón al destacar que el PSOE que hemos visto estos dos días representa el pasado porque mientras el líder “popular” desgranaba un sinfín de propuestas de futuro –también lo hizo Page en su primera intervención-, desde la bancada socialista apenas se ha hablado de otra cosa que de Cospedal, que solo gobernó cuatro años y que ya es casi tan pasado como Bono o Barreda, que gobernaron más de veinte entre los dos. El estado actual de la región, para bien o para mal, es la consecuencia de la política de todos ellos. Y no estamos tan mal.
Castilla-La Mancha cuenta ahora con dos políticos al frente de los dos partidos mayoritarios con capacidad de liderazgo, con ganas de trabajar por el futuro de la región y con claras aptitudes para ejercer su labor con moderación y abiertos al diálogo. Esa es la senda que deben recorrer por el bien de nuestra Comunidad. Ojalá no lo malogren en disputas estériles en las que, como ha ocurrido casi siempre, primen los intereses electorales y de partido por encima de las demandas de la gente.