Nos han contado que ha sorprendido la actitud de PSOE y Podemos al negarse el viernes a debatir el proyecto de ley de presupuestos de la región en la única comisión parlamentaria que se va a celebrar en las Cortes de Castilla-La Mancha en todo el trámite previo a su debate en el pleno de la cámara. Siempre que se han presentado los presupuestos han comparecido en comisión todos y cada uno de los miembros que forman el consejo de gobierno, excepto el presidente, para explicar el contenido del proyecto en las áreas respectivas de cada uno. Esta es la primera vez que no es así y puede entenderse que PSOE y Podemos, sobre todo el primero, quieran acelerar el proceso para que a primeros de septiembre estén las cuentas aprobadas y orden a esa necesidad hayan decidido que comparezca en comisión solo uno de los consejeros, el de Hacienda, que a fin de cuentas es el último responsable del presupuesto y el que tiene un mejor conocimiento global del mismo. Se rompe con la tradición de comparecencias múltiples en aras de economizar tiempo y recursos, aunque pueda ponerse en duda incluso la legitimidad de la medida.

Pero lo que no puede ser entendido de ninguna manera, y más teniendo en cuenta que la situación viene ya forzada, es que los grupos del PSOE y Podemos se nieguen a debatir con el PP los presupuestos en la única comparecencia del Consejo de gobierno que se ha establecido para ello. Durante las nueve horas que duró la comisión de Hacienda del pasado viernes solo tomaron la palabra los diputados del PP y el propio consejero, aunque éste solo habló al inicio de la jornada al reservarse las respuestas a cada uno de los diputados para el final de las intervenciones de todos ellos, otra cosa absolutamente inusual en estos casos. PSOE y Podemos solo tomaron la palabra para decir que no hablaban.

Es cierto que el PP ha planteado una estrategia concreta para alargar el trámite de las comisiones lo más posible. Eso sí, después de que los dos partidos gobernantes decidieran reducir las comparecencias a una sola en contra de lo que ha sido habitual a lo largo de los años. El PP está actuando como si los comparecientes fueran todos los miembros del gobierno y eso ha obligado a ampliar un día más la presencia del consejero de Hacienda en la comisión, que se espera concluya este lunes. En los tiempos antisistema que vivimos, si finalmente no hay debate los ciudadanos se preguntarán para qué sirven los órganos reglamentarios del parlamento. E Incluso el Parlamento mismo. El presidente de las Cortes, Jesús Fernández Vaquero, debería tomar cartas en el asunto.