Nos han contado

Las carcamusas se quedan huérfanas: ha muerto la cocinera del restaurante Ludeña

7 septiembre, 2018 00:00

El Bar Restaurante Ludeña es uno de los tradicionales templos gastronómicos de Toledo, pese a su humilde apariencia y pese a no haber cambiado el aspecto de su fachada y su interior desde hace décadas. Es uno de los mejores sitios de la capital castellano-manchega para degustar aperitivos y cocina de nuestra tierra, pero sobre todo es el lugar en el que se inventó el más genuino plato toledano: las carcamusas. El nombre no está registrado en el diccionario y hay al menos un par de versiones, ya legendarias, de cómo los dueños de Ludeña lo utilizaron como denominación del rico plato de carne con tomate que acababan de inventar.

No se ha estado en Toledo si no se han probado las carcamusas de Ludeña, que acaban de quedarse huérfanas porque María Ascensión, la mujer de Pepe y cocinera de manos prodigiosas, ha fallecido recientemente. Rondaba los sesenta años de edad y nunca paró de trabajar. El bar era su vida y la de su familia en una de las plazas emblemáticas del Casco Histórico en la que el Corral de Don Diego y el Ludeña destacan del conjunto.

El exconcejal y escritor Ricardo Sánchez Candelas ha recordado a María Ascensión con un emotivo y sentido comentario en la última entrada del blog Toledo Olvidado, de Eduardo Sánchez Butragueño.

Tras elogiar el reportaje de Toledo Olvidado y dar las gracias a la familia Burgos por las fotos donadas que le dan contenido, Sánchez Candelas expresa que "una vez más, como en tantas otras ocasiones, Toledo Olvidado nos lleva a sitios toledanos tan entrañables como el Bar Ludeña, en la Plaza de la Magdalena , uno de esos lugares de nuestros registros más sentimentales en los que parece que se ha detenido el tiempo. Hay, sin embargo, en estas fechas un punto de tristeza en este recuerdo. Hace muy pocos días, muy joven todavía, ha fallecido María Ascensión, alma y vida de esa cocina de la que salen maravillas gastronómicas. A buen seguro que lo primero que le ha pedido San Pedro al abrirle la puerta del cielo es que le prepare una ración de carcamusas. Por mi parte, estoy seguro de ser el portavoz de todos los seguidores del blog, toledanos o no, si le dedicamos a ella un momento de nuestro recuerdo, a su marido, Pepe, a los empleados del establecimiento y a toda la familia Ludeña nuestro emotivo afecto en estos momentos".

Descanse en paz.