La política es muy cambiante y a veces ocurre que lo que vale para hoy no significa nada para mañana. Pero la situación política está bloqueada en estos momentos en Castilla-La Mancha debido a la negativa de Podemos a aprobar los Presupuestos de sus "socios" del PSOE y tener así empantanadas las cuentas públicas de la región. Las distintas declaraciones de varios responsables socialistas, tanto en el ámbito de la Junta como en las Cortes, están apuntando al verano como el momento más probable para resolver este problema y aprobar los presupuestos, pero a día de hoy nadie es capaz de decir lo que puede pasar. Presumiblemente será más fácil desbloquear la política castellano-manchega cuando pasen las primarias nacionales del PSOE y las propias primarias que Podemos tiene en la región, ambos procesos fijados para mayo, aunque la última injerencia de Pablo Iglesias en la vida interna de los socialistas con el anuncio de una moción de censura a Mariano Rajoy puede cambiar estos y otros planes.

Ninguna puerta está cerrada a día de hoy entre Page y el secretario regional de Podemos, José García Molina, pero hasta que no pasen las primarias todo está en el aire. Habrá que ver entonces si Page sigue dispuesto a pactar con Podemos y también si García Molina o quien sea el nuevo líder podemita en la región mantiene una disposición a negociar que ahora mismo nadie se atreve a confirmar. En medio de esta incertidumbre, la política y la economía regionales están en situación de crisis y el Partido Popular, que fue el ganador de las elecciones autonómicas y está en la oposición, ha lanzado ya varios mensajes a Page para acercar posturas y pactar conjuntamente los presupuestos sin depender de Pablo Iglesias, si bien hasta el momento en el PSOE hacen oídos sordos. Todo se andará, pero a día de hoy los socialistas castellano-manchegos parecen más dispuestos a pactar con su enemigo, que es Podemos, que con su rival político, que es el Partido Popular, una posición que tras la última ofensiva de Pablo Iglesias que tanto ha molestado en el PSOE puede que ya no sea tan fácil de mantener. En todo caso, la presidenta del PP de Castilla-La Mancha y secretaria general de este partido, María Dolores de Cospedal, lanzó en su momento una oferta que no sabemos si ya está sobre la mesa.

El contexto es complicado y Page tiene la posibilidad probablemente de negociar a varias bandas, aunque todo queda supeditado a las primarias, que tanto en el PSOE como en Podemos están muy enrarecidas y son motivo de un abierto enfrentamiento interno en ambas formaciones políticas. O pacta el presidente de la Junta con Podemos o pacta con el PP, pero alguna solución habrá que dar a este bloqueo. Castilla-La Mancha está pendiente.