Protección Civil alerta a Castilla-La Mancha por vientos fuertes
La Dirección General de Protección Civil y Emergencias ha avisado a las costas del Cantábrico por fuertes vientos y porque al final de la tarde de este miércoles la mar combinada de oeste-noroeste podría provocar olas de hasta 6 metros de altura.
Además, aunque en menor medida, avisa también a las costas del este de Andalucía y a Murcia, porque también pueden tener vientos fuertes en las costas.
Asimismo, advierte de que los vientos en tierra serán fuertes y podrán alcanzarse rachas de 70 a 90 kilómetros por hora en el interior de la Península y especialmente en zonas de Galicia, Asturias, Cantabria, Castilla y León, La Rioja, País Vasco, Madrid, Castilla-La Mancha, Aragón, Valencia, y Cataluña.
También avisa por tormentas localmente fuertes a áreas de Cantabria, País Vasco y Cataluña y señala que las temperaturas seguirán muy altas en la Comunidad Valenciana.
Precaución
Ante esta situación, por vientos costeros aconseja a quienes se encuentren en zonas marítimas que se alejen de la playa y de otros lugares bajos que puedan ser afectados por las elevadas mareas y oleajes que suelen generarse ante la intensidad de vientos fuertes.
También recomienda evitar estacionar los vehículos en zonas que puedan verse afectadas por el oleaje y recuerda que en estas situaciones el mar adquiere condiciones extraordinarias, por lo que puede arrastrar a las personas que se encuentren en las proximidades del mar, por lo que aconseja no poner en riesgo la vida ante las imágenes espectaculares del fuerte oleaje.
Asimismo, ante los fuertes vientos aconseja asegurar puertas, ventanas y todos aquellos objetos que puedan caer a la vía pública y alejarse de cornisas, árboles, muros o edificaciones en construcción o grúas que puedan desprenderse.
También aconseja abstenerse de subir a los andamios sin las adecuadas medidas de protección y a los conductores les insiste en la importancia de extremar las precauciones, especialmente en la salida de túneles, adelantamientos y cruce con vehículos pesados en carreteras de doble sentido, así como prestar atención ante la posible presencia de obstáculos en la carretera.
Por otro lado, señala que el mayor peligro de las tormentas para las personas se produce en campo abierto fundamentalmente pero no obstante, en núcleos urbanos también hay peligro de caída de rayos, por lo que conviene colocarse cerca de los edificios para protegerse. En las viviendas aconseja evitar las corrientes de aire y a los conductores apunta que un vehículo cerrado puede ser un buen refugio.
Finalmente, recomienda a quien se vea sorprendido por una tormenta en el campo, que evite correr y permanecer en lugares elevados, como los altos de las colinas, crestas o divisorias, no refugiarse bajo los árboles y alejarse de alambradas y objetos metálicos.