Los planes de Rajoy para reformar el sistema de financiación autonómica
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado este martes que hay que trabajar con el PSOE y con las comunidades autónomas para aprobar un nuevo modelo de financiación autonómica, ya que, según ha dicho, se necesita "una solución de Estado" porque se trata de la "sostenibilidad de buena parte" del Estado del Bienestar.
"Creo que ese acuerdo es bueno, es deseable. Creo que es bueno que hablemos. Creo que tanto el dialogo con el conjunto de las comunidades como con el PSOE es imprescindible y tenemos que estar de acuerdo en esos dos niveles", ha declarado Sáenz de Santamaría en la presentación del último observatorio financiero del Consejo General de Economistas en Madrid.
Tras insistir en que tienen que "trabajar", la número dos del Ejecutivo ha recordado que el Ministerio de Hacienda ha ido haciendo lo que habían "acordado", los expertos han elaborado un informe y se ha empezado a trabajar en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF).
A su entender, es "importante" que el Gobierno, el PSOE y los ejecutivos autonómicos se sienten a "solventar un asunto tan importante" como éste, que es también "la esencia del Estado de Bienestar" y al que los españoles se sienten "muy apegados" porque constituye una seña de identidad que han mantenido "a pesar de las dificultades" económicas de la crisis.
Un dialogo a dos niveles
Después de que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, haya defendido que se cuente con las comunidades para esa negociación del nuevo modelo, Sáenz de Santamaría ha respondido que "lógicamente" se hará y ha recordado que fue en la Conferencia de Presidentes celebrada en enero del año pasado cuando "arrancó este tema". Además, ha añadido que los debates se están produciendo en el seno del CPFF.
"Creo que estamos hablando de un diálogo a dos niveles entre administraciones porque se precisa un acuerdo de Estado entre el Gobierno y las administraciones autonómicas y un acuerdo a nivel político porque es una ley orgánica que tiene que pasar por el Congreso y el Senado. Hay que trabajar en ambos frentes, hacerlo con gran intensidad y con la responsabilidad de saber que ahí de lo que se está dialogando es del mantenimiento de nuestros servicios esenciales", ha subrayado.
"Una verdadera reforma de Estado"
Durante su intervención en el acto, Sáenz de Santamaría ha vuelto a insistir en la necesidad del trabajo conjunto con CCAA y partidos políticos para lograr ese acuerdo. "Somos muy conscientes de que se necesitan dos consensos, el de los gobierno autonómicos en el CPFF y una amplia mayoría parlamentaria, en particular el partido que lidera la oposición", ha afirmado.
La vicepresidenta ha hecho hincapié en que se trata de una "verdadera reforma de Estado" que requiere tener un consenso "muy amplio" y ser capaces de entender que el sistema "debe funcionar y dar respuesta en los momentos de crisis y de bonanza".
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Por su parte, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, se ha mostrado partidario de que PP y PSOE, "los dos grandes partidos", logren un acuerdo que siente las "bases" de la financiación autonómica, si bien ha abierto la puerta a que entren "otros partidos".
En un desayuno informativo organizado por la Cadena Ser de Cuenca, García-Page ha puesto el acento en la importancia de que este "problema" pueda arreglarse en el corto plazo, y para ello PP y PSOE tienen que llegar a un consenso sobre "los principios generales de financiación", añadiendo además que el acuerdo tiene que ser también "territorial".
En este punto, ha señalado que podría ser "más cercano" a lo que piense, por ejemplo, el presidente 'popular' de Castilla y León, que lo que puedan opinar al respecto "otros compañeros de partido" como en el País Vasco.
Así, ha querido dejar claro que si tuviera que elegir entre un "planteamiento de partido o ideológico" o defender los intereses de Castilla-La Mancha, se queda con lo segundo. "Mi apuesta es la región, y estoy dispuesto a llegar a acuerdos con presidentes que tengan nuestro mismo problema y no con otros sólo por darle el gusto a mi partido o a algún amigo", ha avisado.
En esta línea, ha defendido que el nuevo modelo de financiación autonómica tiene que ir ligado a una "convergencia fiscal" en todo el país, al tiempo que ha avisado que no va a permitir que España "eche mano del cheque para apaciguar ansias independentistas".