CSIF se echa a la calle para pedir una equiparación entre funcionarios que cuesta 600 millones
El sindicato CSIF ha llevado este miércoles a cabo concentraciones en todo el país para exigir la equiparación salarial de todos los empleados de la Administración General del Estado (AGE), lo que ha cuantificado en 600 millones de euros que el CSIF propone distribuir a lo largo de los próximos tres años.
Un centenar de personas se han concentrado en la plaza de Zocodover de Toledo y han entregado en la Delegación del Gobierno un manifiesto con las reivindicaciones que plantea el CSIF dentro de la campaña 'A igual trabajo, mismo salario', lo mismo que ha sucedido en las Subdelegaciones del Gobierno en cada provincia.
En declaraciones a los periodistas, el presidente provincial del sindicato en Toledo, Ángel Carvajal, ha señalado que sus reivindicaciones son "algo por derecho que todo el mundo debe entender" ya que las diferencias retributivas dentro de los funcionarios pueden alcanzar el 20 por ciento entre los del Estado y los de comunidades autónomas como Cataluña o el País Vasco.
Ha explicado que las retribuciones fijas son las mismas para todos, establecidas en el Boletín Oficial del Estado según categorías, pero varían, y "con una horquilla realmente importante", los complementos específicos, que hacen que unos empleados públicos cobren más que otros haciendo el mismo trabajo.
Especial hincapié ha hecho en determinados empleados, como los de la Administración de Justicia en las comunidades que tienen estas competencias transferidas, los del servicio de vigilancia aduanera, que "se juegan la vida" o los funcionarios de prisiones, dos casos en que la "brecha" salarial es mayor incluso que en la Guardia Civil o la Policía Nacional.
OPE 2017
Carvajal también se ha referido a la oferta de empleo público de 2017, que se eleva a 4.725 plazas en cuerpos generales del Estado, y ha señalado que el CSIF valora "el esfuerzo" que se hace pero es "insuficiente" porque solamente los funcionarios que se jubilan este año son más de 4.000, que serán más de 50.000 en los próximos años porque son trabajadores que ya han cumplido 60 años.
En base a estas jubilaciones, la oferta de empleo de 4.725 plazas quedaría reducida a poco más de 700 plazas, ha indicado Carvajal quien ha dicho que en Castilla-La Mancha se han perdido 1.907 puestos de trabajo en los últimos años: 554 en la provincia de Ciudad Real, 475 en Toledo, 446 en Albacete, 250 en Guadalajara y 182 en Cuenca.
Esto significa que en Castilla-La Mancha se ha perdido un empleado público cada día durante los últimos cinco años y en el conjunto del país cien cada semana.
El sindicato no se conforma con la "promesa" del Ministerio de una subida salarial del 1,5 % y "si todo va bien" un incremento del 6,5 % en cuatro años, y exige una subida no inferior al 10 %.
En Ciudad Real, unas 150 personas se han concentrado ante la Subdelegación del Gobierno y el presidente del CSIF en la provincia, Lorenzo Domínguez, ha asegurado que es "de justicia" reducir la brecha y ha agregado que este es el momento de hacerlo, porque la economía crece al 3 por ciento.
En Guadalajara, el presidente provincial del CSIF, Pablo Moya, ha dicho a Efe que "al igual que ocurre con Guardias Civiles y Policías, existe una brecha salarial que en nuestro caso es de hasta un 25 % menor que otras comunidades como la vecina Comunidad de Madrid".