Los ribereños del trasvase insisten en que los pagos de los regantes no compensan el perjuicio
La Asociación de Municipios Ribereños de los pantanos de Entrepeñas y Buendía, en la cabecera del Tajo, ha repetido que los regantes que usan agua del Trasvase Tajo-Segura "no pagan compensación alguna a la cuenca cedente", ya que el pago lo hacen al Estado. Una "mentira" como aseguran que, tras repetirse tanto, comienza a ser tenida como "una verdad", además de añadir que el perjuicio que causa el trasvase no se compensa con estas cuantías.
En una nota de prensa, la asociación ha recordado que los regantes pagan al Estado, que desde 1986 reparte la parte correspondiente a la amortización del coste de las obras de construcción entre tres comunidades. Asimismo, ha señalado que nunca se ha hecho una valoración económica de los daños originados por el trasvase en la cuenca cedente, que pudieran repercutir en la tarifa.
"Pagan por la obra y por su uso y no sólo los regantes, todos sus usuarios, también los del abastecimiento, que pagan tres veces más por la amortización", ha precisado la asociación. Así ha querido salir al paso el colectivo tras las declaraciones del vicepresidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo Segura (SCRATS), José Antonio Andújar, sobre la compensación económica que pagan por el trasvase.
Según los ribereños: "Es una mentira que, repetida millones de veces, ha terminado por calar ya no sólo entre los propios regantes sino entre los vecinos de las comarcas afectadas, que se preguntan a dónde han ido a parar todos esos millones que los regantes pagan teóricamente cada año".
Un perjuicio que no compensa
Además, ha subrayado que la realidad es que de esos 400 millones que aduce el responsable del SCRATS, "a Castilla-La Mancha le llegan cuatro novenas partes, a Madrid tres y a Extremadura, dos desde 1986". Suponen en total algo más de cinco millones anuales para toda la comunidad que, a juicio de Francisco Pérez Torrecilla, no compensa "de ninguna de las maneras" porque "el perjuicio es muy superior".
"Están destruyendo un río, el más largo de la Península, patrimonio cultural y medioambiental de todos los españoles, y todavía pretenden que les demos las gracias por cuatro cochinos euros", ha concluido.