Nuevo capitulo en la sorprendente guerra dialéctica entre médicos y la directora del Sescam
El Sindicato Médico de Castilla La Mancha, CESM CLM, ha considerado que la directora gerente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, Regina Leal, comete "un grave error" al querer dar lecciones a este sindicato sobre cuáles deben ser sus prioridades, dado que "por encima de cualquier interés económico o profesional siempre estará la seguridad y salud de los facultativos en sus puestos de trabajo".
"Somos una organización democrática, independiente y profesional, formada por facultativos 100 %. Es nuestra obligación constitucional defender el interés de la sanidad pública y los intereses laborales y sociales de todos nuestros compañeros", han defendido.
CESM CLM ha respondido de este modo, en un comunicado, a la directora general del Sescam que este pasado martes, en rueda de prensa, conminó a este sindicato a "no usar" las agresiones a los profesionales médicos como "arma arrojadiza", pues a su modo de ver "empeora la acción de prevención". "Los sindicatos tienen temas suficientes para poder consolidarse entre los profesionales sin necesidad de usar estas cuestiones", defendía Leal.
CESM ha respondido a la responsable del Sescam que la Ley de Prevención de Riesgos Laborales les asigna facultades a los delegados de prevención para ejercer una labor de vigilancia y control sobre el cumplimiento de la normativa de prevención.
"En este contexto hemos propuesto desde hace años a la Administración medidas de prevención y protección frente a las agresiones, no siendo contestadas aún a día de hoy. No se ha vuelto a convocar desde hace muchos meses el Observatorio Frente a las Agresiones, donde parece ser que somos los únicos que elevamos la voz para denunciar las agresiones a los compañeros, de lo cual nos sentimos muy orgullosos", han defendido desde este sindicato.
"La protección de los trabajadores es un deber de la Administración que no puede obviar ni delegar en ningún observatorio. Exigimos dotación presupuestaria para poner en marcha un Plan General de Prevención frente a las agresiones. Necesitamos así mismo protocolos y medidas urgentes de asistencia en aquellos centros más alejados de las fuerzas de seguridad", han reclamado.
De igual modo, han solicitado la elaboración de un mapa de riesgo para conocer cuáles son los centros más conflictivos y poner las medidas preventivas necesarias, como por ejemplo vigilantes jurados, monitores de videovigilancia, diseño adecuado de las instalaciones para garantizar la seguridad de los trabajadores.
"Exigimos información y formación sobre prevención de agresiones para todos los profesionales como así viene recogido en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, como una obligación ineludible del Sescam y un derecho de los profesionales, hasta hoy incumplido", concluye el sindicato.