El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha afirmado este jueves que "ni este gobierno ni ninguno" tiene "autoridad" para "negociar en nombre de todos lo que es la soberanía nacional", por lo que, más allá del "ruido" que ha generado la figura del relator, "riesgo de fondo no puede haber".

En declaraciones este jueves en Antena 3, García-Page ha dejado claro que como presidente de una comunidad autónoma no se va a quedar "cruzado de brazos" a la hora de defender la Constitución porque de España "hablamos todos".

Ha señalado que "más allá del ruido" que ha generado la decisión de incorporar la figura del relator a la mesa de partidos para el diálogo sobre Cataluña él se queda con las palabras que "hace muy poco tiempo" dijo el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, sobre que una mediación está el Congreso de los Diputación: "es lo que dije yo ayer exactamente", ha precisado.

García-Page ha dicho que le preocupa que haya "gente de buena fe" en Cataluña que "por no hablar con claridad" se esté creyendo "que va a ser posible que voten por su cuenta", algo que no es posible "ni en esta Constitución ni en ninguna del mundo", por lo que ha sugerido que es mejor "hablar claro", esto es "ponerse una vez colorado que ciento amarillo".

Ha subrayado que "ni este Gobierno ni ninguno, con mayoría pequeña o abultada, da igual, está en condiciones y tiene autoridad como para negociar en nombre de todos lo que es la soberanía nacional", por lo que "en el fondo" hay que tener la tranquilidad de que "riesgo de fondo no puede haber" más allá del ruido que se ha originado.

Sobre la manifestación convocada por el presidente del PP, Pablo Casado, contra la política de Sánchez, ha dicho que le parece "desproporcionado" y que "responde más a la crisis de nervios que tienen desde que ha aparecido Vox", y ha apuntado que lo que él apoyaría sería "una gran movilización, no digo manifestación, sino una gran fuerza social" para reforzar la Constitución y rechazar el independentismo. 

En el ámbito interno del PSOE, ha insistido en que cuando se habla de España debe hacerlo "el PSOE, no el PSC", y respecto al Gobierno catalán ha considerado "grave" lo que ha dicho la portavoz, Elsa Artadi, sobre que necesitan a alguien para que lo que hablan en privado con el Gobierno central se diga también en público.